César Cabrera es mecánico, tiene 52 años, hace unos meses le dio un infarto.
“Los dolores en el pecho eran mucho muy fuertes, en el brazo igual, de hecho, no se soportan, llega el dolor y comienza uno a ponerse blanco, blanco, y a sudar frío, al grado de que en uno o dos, tres minutos acaba uno bañado en sudor, y no cede el dolor, al grado de que dan ganas de llorar”, narra César Cabrera.
Un infarto cardiovascular es siempre una emergencia, pues está de por medio la vida y funciones vitales.
“Existe una reducción de la llegada de sangre al corazón y el músculo cardiaco puede morirse si no es reperfundido o se logra restablecer esa circulación hacia la zona que está siendo obstruida”, explica el doctor Erick Alexanderson, presidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología.
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en la población mayor de 35 años de edad en el mundo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Existen alrededor de 250 o 280 mil infartos al año, la mortalidad por infarto se acaba de expresar por la Secretaría de Salud entre 70 y 80 mil muertes por infarto del miocardio al año”, indica el doctor José Manuel Enciso, de la Asociación Nacional de Cardiólogos de México.
“Los factores de riesgo que hace que sea más probable que yo tenga una enfermedad de este tipo son muy comunes en la población, los principales son la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, la dislipidemia, el tabaquismo, y si a eso le agregamos sobrepeso, sedentarismo, factor de estrés, de tensión, malos hábitos dietéticos”, detalla el doctor Erick Alexanderson, presidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología.
Los síntomas de un infarto son muy variados:
– Dolor muy fuerte en el pecho
– Sensación de opresión en el pecho
– Falta de aire
– Dolor y hormigueo en el brazo izquierdo, o puede ser el derecho
– Dolor fuerte en la parte alta del abdomen
– Dolor en la espalda alta
– Sudoración con sensación de frio, entre otros
Aquí, un electrocardiograma puede verificar el diagnóstico.
Pero ya en caso de un infarto, hay que llevar rápido a la persona afectada a un hospital, mejor de tercer nivel, los especialistas indican que en teoría, se tienen de 2 a 4 horas para que le den tratamiento una vez iniciados los síntomas y mientras le da el infarto, algunas acciones pueden ayudar.
Leer: El frío aumenta el riesgo de infartos cardiacos
“Una recomendación sería efectivamente tomar una tableta, o masticar una tableta de ácido acetil salicílico”, menciona el doctor Marco Antonio Peña Duque, cardiólogo.
Un infarto no debe tratarse en un consultorio de la esquina de la casa, hay que acudir a un hospital, ahí el objetivo será deshacer el coágulo que obstruye las arterias del corazón, a través de fármacos potentes, o en una sala de hemodinamia, con un cateterismo cardiaco.
Leer: Saltarse el desayuno aumenta el riesgo de sufrir un infarto, revela estudio
“Lo que hacemos mecánicamente, extraer el coágulo en algunos de los pacientes directamente, en otros inflamos unos globos o balones de angioplastia, y por último ponemos unas mallas por dentro de la arteria que feruliza internamente la arteria que se llama stent, y este procedimiento de la angioplastia y el stent es el tratamiento ideal”, detalla el doctor Marco Antonio Alcocer, cardiólogo intervencionista.
La buena noticia es que conociendo su riesgo cardiovascular y modificando los factores de riesgo, el infarto se puede prevenir.
Con información de Irlanda Maya
JLR
