Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), calificó como un mensaje intimidatorio contra los defensores de las garantías individuales el homicidio de Silvestre de la Toba Camacho, titular de la Comisión Estatal de Derechos de Baja California Sur.
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Atribuyó lo ocurrido a la falta de interés y acompañamiento de parte de las autoridades federales, estatales y municipales a las labores de protección de los derechos humanos.
Hoy el mensaje para los defensores civiles, públicos y privados, es un mensaje que no debemos permitir, hechos como los que acontecieron ayer ponen en evidencia la insuficiencia de las tareas que le tocan a los tres niveles de gobierno. Y la indiferencia de las autoridades de estos tres niveles de gobierno propicia condiciones para que se atente contra los defensores civiles”, señaló Luis Raúl González Pérez, presidente de la CNDH.
A nombre de la Federación de Organismos Públicos de Derechos Humanos, el ombudsman demandó el pronto esclarecimiento del asesinato de Silvestre de la Toba y que en las líneas de investigación sean tomados en cuenta los casos que investiga la comisión que estaba a su cargo.
González Pérez reconoció que ha tenido conocimiento de amenazas contra titulares de comisiones estatales de derechos humanos. Aseguró que no ha sido su caso.
Es una situación compleja, difícil, mayormente donde hay circunstancias de asentamiento muy pronunciado de crimen organizado. No estamos exentos en Guerrero, Tamaulipas, Veracruz, en donde hemos tenido acciones de acompañamiento, pero no han llegado a los niveles que sucedió hoy en Baja California Sur, por fortuna no he recibido amenazas. Mi trabajo ha generado tensiones, tensiones muy fuertes, sí”, aseguró el titular de la CNDH.
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos encabezó el relanzamiento de una campaña publicitaria en favor del trabajo de los defensores de derechos humanos. Al inicio del acto pidió un minuto de silencio en memoria del ombudsman de Baja California Sur y de todos los defensores civiles de Derechos Humanos que han sido asesinados.
En la entrada de las oficinas centrales de la CNDH fue colocado un moño negro en señal de luto.
Con información de Arturo Cerda
MAP
