La operación de rescate de la vaquita marina sigue suspendida, porque “es importante esperar los resultados de la necropsia; necesitamos asegurarnos de saber qué pasó, si fue inherente a este individuo o a la especie; tenemos que saber si la especie no puede soportar el estrés de un cautiverio”, afirmó Rafael Pacchiano, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en la mesa de Despierta con Loret.
Sobre la prohibición de pescar en la zona del Mar de Cortés, indicó que “lo ideal es no prohibir; el problema son las redes agalleras; antes no se hacía nada, pero ahora hay artes de pesca que no interactúan con la vaquita marina”; sin embargo, acotó, “se extendió la prohibición, porque necesitamos que no haya nadie en el agua mientras se hacen los esfuerzos de captura para proteger a la vaquita marina”.
José Calzada Rovirosa, secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), declaró que se pasó “de un área protegida de 1,000 kilómetros a 11,500 kilómetros cuadrados, para dimensionar el área que se tiene que proteger; es un ejercicio muy importante y este año desarrollamos nuevas artes de pesca que pagó el Gobierno; no se han probado en un recorrido al mar porque no han podido salir en aras de proteger a la vaquita marina”, para lo cual “tenemos un mundo de gente y estamos trabajando; este año hemos puesto a disposición a 135 personas que fueron capturadas ejerciendo la pesca ilegal”. Además, pidió, “que se castigue no sólo al pescador, que son instrumento de redes más extensas de crimen organizado”.
Para el almirante Romel Eduardo Ledezma Abaroa, “la Secretaría de Marina continuará con las operaciones de vigilancia y seguridad en el Golfo de California; haremos especial énfasis en evitar la pesca ilegal y, sobre todo, el uso de las redes agalleras”. Acotó, sin embargo, que “la captura de quienes ejercen la pesca ilegal es un proceso que llevamos de la mano con las instancias de seguridad pública y las de procuración de justicia, nosotros apoyamos, pero ellos llevan la mano, nosotros ponemos a disposición a estos infractores, pero la mano la llevan las instancias de seguridad, pero sobre todo las de procuración de justicia”.
Calzada Rovirosa indicó que los pescadores “quieren hacer lo que saben, que es pescar. Cada mes se les paga, aproximadamente, 45 millones de pesos por no pescar, ésa es una de las contribuciones del Gobierno; queremos darles alternativas viables para que puedan vivir no sólo de la subvención, sino que puedan ejercer el turismo sustentable o alguna otra actividad relacionada con el turismo”.
Rafael Pacchiano indicó que “el problema de la vaquita marina tiene muchas décadas, es hasta esta administración que puedes ver a tres Secretarías trabajando de la mano. Es un trabajo que hacemos en emergencia, que se debió hacer desde mucho antes, pero ahora ya tenemos artes de pesca diferentes, tenemos otras alternativas, y tenemos que averiguar qué pasó con el ejemplar, si se suspende o no el santuario, aunque, eventualmente, se tiene que liberar el espacio, cuando se concluya el trabajo con la vaquita marina, tenemos que liberar el Mar de Cortés y tenemos que asegurarnos que esté libre de redes, tenemos que hacerlo efectivo”.
Pacchiano recordó que “en los últimos años el Gobierno ha invertido en un proyecto de la Universidad Autónoma de Baja California para la producción de totoabas en cautiverio, que, con una inversión conjunta, se ampliará a un millón de totoabas, porque pretendemos convertir el Alto Golfo en una gran granja de totoaba y así no tienen que ser capturadas en estado salvaje, poniendo en riesgo a la vaquita marina. Quien saca totoaba por necesidad, queremos que pueda sumarse a este programa”. “Y que no tengan que poner en riesgo su libertad”, acotó Calzada Rovirosa.
El titular de Semarnat aseveró que el compromiso del Gobierno es que “se seguirá dando compensación hasta diciembre y pueden salir en enero a pescar con nuevas artes de pesca”.
Para Romel Ledezma, “el problema es pescar con la red agallera, en cuanto tengamos neutralizado el uso de esa red, vamos a ir avanzando, porque el objetivo de salvar a la vaquita marina está íntimamente ligado a la tototaba; resolviendo el problema de la totoaba vamos a avanzar. Tenemos la última tecnología para esta labor; tenemos unidades de superficie, drones, aviones, los técnicos e ingenieros más capacitados, tenemos todos los medios para tener éxito”.
Calzada Rovirosa aseguró que, en la labor de proteger a la vaquita, platicó “con el secretario de Alimentación de China para que no se permita el ingreso de buche de totoaba, y al no permitirse ese ingreso, la depredación se tiene que frenar”. Además, “hay investigaciones en curso, se han puesto 135 personas a disposición de las autoridades correspondientes y vamos a seguir investigando”.
Además, abundó Pacchiano, “ha habido un cambio en el modo de tráfico, ya no sólo va por tierra a Estados Unidos, también está saliendo por aire; hay ciudadanos chinos en México trabajando para llevarse los productos de totoaba. Otra cosa en la que vamos a invertir es el retiro permanente de redes fantasma y también el sistema de monitoreo acústico, que nos permite saber dónde están los ejemplares de la vaquita marina”.
Lo cierto, dijo José Calzada, es que “hay que combatir el tráfico de totoaba; es prioridad, por eso hemos tenido acuerdos, decretos y convenios; hoy está penado como delincuencia organizada y se endurecieron las penas”.
En Semarnat, dijo Rafael Pacchiano, “aprovechamos para enrocar a los inspectores que estaban en la zona; hoy son todos nuevos, para combatir la corrupción”.
Pacchiano Alamán indicó que “los esfuerzos del Gobierno van a seguir para cuidar a la vaquita marina. No estamos pesimistas porque hemos visto ejemplares juveniles y tenemos los medios para seguir este esfuerzo”. (Con información de Despierta con Loret)
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