La doctora María del Sol García Ortegón se convirtió en la primera mujer cirujana cardiovascular en realizar un trasplante de corazón en México.
“Estoy feliz, quiero darle las gracias a los doctores, en especial a la doctora que me atendió desde un principio. Me dice todo va a salir bien, confía, y mira aquí estoy gracias a ella”, afirmó Enedina Solís, paciente trasplantada del corazón.
La cirujana cardiaca García Ortegón estuvo apoyada por su equipo de especialistas del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
“Es algo maravilloso tuvimos la oportunidad el 11 de julio de hacer el trasplante de Enedina Solís una pacientita que estaba en espera de un corazón desde hacía año y medio, casi dos años por una cardiomiopatía dilatada, que es una enfermedad terminal del corazón y pues el proceso para que yo pudiera llegar a esto no es algo de un día para otro, tengo 15 años de experiencia en cirugía cardiaca”, detalló la especialista.
En México, el primer trasplante de corazón se realizó hace 29 años a cargo del doctor Rubén Argüero, desde entonces, ninguna mujer había estado al frente de esta tarea.
“La primera mujer médica en el país fue Matilde Montoya y esto se da en 1887 entonces si tú te fijas es poquito más de un siglo, pero el que hoy tengamos a una mujer que realice el primer trasplante como tal, es sumamente relevante porque este tipo de mujeres van a ser los arquetipos y los ejemplos para otras jóvenes”, afirmó Laura Liselotte, jefa del Centro de Estudios y Apoyo para la Mujer.
El Consejo de Cirugía de Tórax tiene certificados hasta el momento poco más de 500 médicos para realizar procedimientos cardiacos, de diferentes tipos, en el país, sólo 17 de ellos, son mujeres.
“Hombres y mujeres están en igualdad de condiciones, lo que queremos es que muchas mujeres sigan haciendo muchas actividades como la de salvar una vida y eso es sumamente importante”, puntualizó Liselotte.
A casi un mes de la cirugía, Enedina ha evolucionado satisfactoriamente, ahora se encuentra en proceso de recuperación, en espera de ser dada de alta.
“¿Que significa tener un corazón en las manos, una vida en las manos? Es una experiencia maravillosa es algo indescriptible que te enchina la piel, que te hace muy feliz sobre todo ya después ver a la paciente contenta y alegre”, reconoció la cirujana cardiaca, María del Sol García Ortegón.
Con información de Farah Reachi
AGHO
