El viernes pasado, una hora antes del juego entre Puebla contra Veracruz, programado para las 21:00 horas, la Asociación de Árbitros anunció que no se presentaría a los partidos de la jornada 10 de la Liga MX.
La inconformidad radicó en que consideraron insuficiente la suspensión de ocho y 10 partidos que la Comisión Disciplinaria aplicó a Enrique Triverio, del Toluca, y a Pablo Aguilar, del América, quienes agredieron a los silbantes de los partidos de la Copa MX, Toluca contra Morelia y América contra Xolos.
Tras analizar el caso, este lunes, la Comisión de Apelaciones decidió ampliar la sanción y dio a ambos futbolistas la suspensión de un año.
Decio de María, presidente de la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut), celebró “la decisión de la Comisión de Arbitraje de haber sometido una apelación a la resolución de la Comisión Disciplinaria”.
En 1934, José Rosas fue el primer futbolista sancionado por un año, tras agredir a un árbitro en el futbol mexicano.
La última vez que ocurrió un castigo similar fue en 1998, cuando Christian Zermatten, de los Pumas, agredió a Felipe Ramos.
Con información de Sarahí Méndez.
RMT
