CIENCIA Y TECNOLOGíA

Muñecas de silicón, atracción de X Dolls, nuevo prostíbulo en Francia

Se trata del primer establecimiento de este tipo en Francia, país donde los burdeles están prohibidos desde 1946 y donde además existe una polémica ley que castiga con hasta 4 mil 500 dólares a quien pague por sexo con prostitutas.

Nos adentramos al local bautizado como X Dolls, que acaba de abrir sus puertas en el distrito 14 de París. Un prostíbulo insólito.

Aquí los objetos de deseo no son sexoservidoras de carne y hueso, sino muñecas de silicona, hiperrealistas, de diferentes tamaños colores y estilos, con toda la anatomía de una mujer de verdad.

Joachim Lousquy, fundador de X Dolls, explica: “Aceptamos a hombres solos, a mujeres solas, a parejas, gays, lesbianas, homosexuales, heterosexuales, a todos. Una hora le cuesta a un hombre 112 dólares; a una pareja, 150 dólares.

En cada una de las 4 recámaras hay preservativos, lubricantes, pañuelos antibacteriales y pantallas que transmiten videos eróticos. La higiene de las maniquíes de goma figura entre las prioridades.

Joachim Lousquy, fundador de X Dolls, señala: “Pronto habrá muñecas sexuales que podrán hablar, interactuar, vibrar, calentarse, en fin, tendrán inteligencia artificial”.

Este nuevo negocio de prostíbulos de muñecas inflables nació hace unos años en Japón. Ahí tiene un éxito inmenso.

El precio en el mercado de una figura como esta puede ascender a 7 mil 500 dólares. El club le permite al cliente llevarse la muñeca a casa durante algunas horas.

¿Así será nuestro futuro sexual? ¿Nos dirigimos hacia la robótica del placer?

El local asegura que las muñecas como ésta, de tamaño natural y con un aspecto muy realista, realizarán todas las fantasías del cliente, sin ningún tipo de límites.

Con información de Kasia Wyderko

MLV