El dólar se apreciaba el viernes y ampliaba su reciente alza, mientras que el euro se encaminaba a cerrar su peor desempeño semanal desde noviembre de 2016 después de que una ola de ventas en el mercado global de acciones presionaba a inversores posicionados para un billete verde más débil.
Apostar contra un dólar más débil frente al euro ha sido una de las operaciones más populares este año, debido a que un repunte de la economía europea alimenta expectativas de que el Banco Central Europeo reduzca su hoja de balance antes de lo previsto.
El euro se apreciaba un 0.04 por ciento, a 1.2247 dólares, lo que lleva a una pérdida semanal de 1.7 por ciento. En lo que va del año, el euro acumula un alza de 2 por ciento. A fines de enero, tocó un máximo de tres años de 1,2538 dólares.
El dólar se apreciaba un 0.19 por ciento frente a una cesta de monedas y acumula un 1.4 por ciento en la semana, su mejor desempeño desde noviembre de 2016. No obstante, la divisa estadounidense registra una baja de 1.8 por ciento este año.
El dólar recuperaba algo de terreno frente al yen durante las primeras operaciones europeas luego de caer más temprano a mínimos de cuatro meses debido a que los inversores buscaban la seguridad de la divisa japonesa.
Antes de la agitación en los mercados de esta semana, una de las tendencias más populares en el mercado cambiario era comprar euros por expectativas de un retiro de los estímulos del BCE y de vender yenes por la previsión de que el Banco de Japón será el último en abandonar su política ultraexpansiva.
La volatilidad del mercado bursátil aumentó esta semana y aunque los mercados cambiarios han permanecido mucho más calmos, la agitación ha afectado algunas operaciones populares.
Las divisas de mercados emergentes y vinculadas a las materias primas, como el dólar canadiense y australiano, también eran afectadas por la agitación de esta semana tras gozar de una racha alcista frente al dólar.
Con información de Reuters
MFH
