CONFLICTOS ARMADOS

Las armas nucleares son un suicidio para el mundo, afirma Jans Fromow Guerra

La acumulación y uso de armamento nuclear en el mundo “es un suicidio desde la perspectiva que se le vea, advirtió Jans Fromow Guerra, integrante del colectivo que ganó el Premio Nobel de la Paz 2017.

El galardón fue concedido a la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares (ICAN), una organización internacional que agrupa a organizaciones no gubernamentales de un centenar de países por su trabajo para llamar la atención sobre las consecuencias humanitarias y catastróficas del uso de armas nucleares y por sus esfuerzos innovadores para lograr una prohibición basada en tratados.

Jans Fromow Guerra, médico Cirujano en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con especialización en Oftalmología y entrenamiento de subespecialidad en enfermedades y cirugía de retina y vítreo, ha formado parte de ese colectivo, como explicó en la mesa de Despierta con Loret. “Colaboro con la organización Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear, entré allí en 1991 como estudiante de medicina y ya fui vicepresidente de la organización”, detalló.

Abundó que en “2005 había un impasse, estaba todo paralizado en la cuestión del desarme y a un presidente de la organización se le ocurrió que podíamos emular lo que hizo otra asociación con el asunto de las minas antipersonas”.

Después de proponerlo, “nuestra filial en Australia reúne a las organizaciones y empezamos con actividades hasta que se da esta secuencia afortunada con distintos países, incluyendo a México”.

Aseguró que lo valioso de este movimiento es que “la campaña no creó el tratado contra las armas nucleares, sino que es producto del trabajo de los países”.

Jans Fromow Guerra sostuvo que el armamentismo “es un tema que no está resuelto; sigue siendo la preocupación y amenaza más grande para la vida como la conocemos y tiene tres vertientes: el terrorismo de arma nuclear, las guerras de baja intensidad y las guerras extensas; en todos hay presencia de armas nucleares”.

El médico señaló que el intercambio de declaraciones entre Donald Trump, presidente de Estados Unidos, y Kim Jong-Un, mandatario de Corea del Norte, “es un ejemplo muy claro de por qué no puede haber armas nucleares, porque la forma en la que están hechas permite que estemos en manos de dos personas que no saben qué implica que haya armas nucleares; el tema de Trump y Corea del Norte es muy peligroso”.

En la consideración de Fromow Guerra “estamos como en los tiempos de la Guerra Fría. Estamos tan en peligro como en ese punto, antes había 70 mil armas en el mundo y ahora hay 15 mil, pero aun con la implementación, en 2018, de un nuevo tratado contra las armas nucleares, ese arsenal es suficiente para acabar la vida en este planeta”.

El especialista afirmó que es complicado saber cuántas armas tiene realmente cada país, porque “el asunto es que hay una gran secrecía; no sólo Corea del Norte mantiene esto en secreto, todo lo que es cuestión nuclear son secretos militares”.

Jans Fromow Guerra señaló que sí es posible que existan bombas de las llamadas sucias, es decir, artefactos explosivos que diseminan elementos radiactivos en la atmósfera, porque “están documentadas pérdidas de material nuclear, sobre todo por parte de Rusia”; además de que “hacer una bomba nuclear de baja intensidad, sucia, sin mayor refinamiento, no es difícil”.

El médico advirtió que incluso un conflicto regional puede tener grandes repercusiones. “¿Qué pasaría con una guerra nuclear limitada usando sólo la mitad del arsenal entre Pakistán e India? Eso es menos del 1% del arsenal nuclear del mundo y con eso 20 millones de personas morirían en una semana, en toda la guerra mundial murieron 50 millones”, aseguró.

Después “vendría una hambruna nuclear, habría incendios en varias partes del mundo que mandarían tal cantidad de smog al espacio que disminuiría la cantidad de sol que llega a la Tierra y disminuirían las cosechas mundiales”, eso “afectaría en primer lugar a las personas que ya viven en hambruna; más toda la cantidad de personas en extrema pobreza, porque esto encarecería los alimentos y no podríamos acceder a ellos”. Nada más México “es uno de los principales importadores de granos en el mundo, así que imagínense qué pasaría en nuestro país”. (Con información de Despierta con Loret)

 

 

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