Los dos jóvenes refugiados que intentaron suicidarse con sendos cuchillos el pasado viernes junto al Parlamento finlandés son una pareja de gays rusos a los que les fue denegado el asilo en el país nórdico, reveló este miércoles el diario “Ilta Sanomat”.
Los dos jóvenes se autoagredieron en la escalinata de acceso al Parlamento finlandés, en el centro de Helsinki, clavándose cuchillos en el estómago, aunque no sufrieron heridas de gravedad y fueron rápidamente trasladados a un centro hospitalario.
Las autoridades finlandesas no quisieron hacer pública ninguna información sobre el suceso, excepto que se trataba de dos solicitantes de asilo, y la pareja -Aleksander, de 19 años, y Nikita, de 22- contactó al citado medio para explicar el motivo de su intento de suicidio.
“Somos una pareja gay de Rusia y buscamos asilo porque en nuestro país se nos persigue por nuestra orientación sexual”, denunció uno de ellos.
La pareja explicó que las autoridades migratorias finlandesas tramitaron su solicitud mediante un procedimiento de urgencia y les denegaron el asilo, por lo que podían ser deportados de inmediato a Rusia pese a que han recurrido la decisión.
“Da la sensación de que en Finlandia se guarda silencio deliberadamente sobre nuestros problemas o que sus autoridades no se dan cuenta de los homosexuales en Rusia vivimos en una situación realmente angustiosa”, afirmaron.
Según “Ilta Sanomat”, la pareja no quiere revelar sus apellidos ni su lugar de procedencia para no poner en peligro a sus familiares y amigos, aunque denunciaron que las autoridades rusas ya han averiguado su identidad y han interrogado a sus amistades.
“No podemos volver a Rusia a esperar si Finlandia admite el recurso y nos da finalmente asilo. Si regresáramos nos meterían a la cárcel o nos matarían por la calle”, dijeron.
La desesperación llevó a los dos jóvenes a acuchillarse a pleno día junto al Parlamento de Helsinki para llamar la atención pública sobre su situación y la de otras parejas gais rusas.
“No sólo buscábamos publicidad, sino que realmente estábamos dispuestos a morir. Preferimos morir en Finlandia antes que regresar a Rusia”, aseguraron.
AAE
