Lula viajó en avión durante la mañana a esa ciudad ubicada en el sur de Brasil que desde hace días desplegó cientos de policías militares, guardias municipales, retenes, carros blindados y helicópteros, para evitar enfrentamientos violentos entre manifestantes a favor y en contra del exmandatario.
Tras llegar en auto, el expresidente entró a las 13:45 horas locales (17:45 GMT) al edificio del tribunal, custodiado por fuertes medidas de seguridad.
Antes de ingresar en el juzgado, el expresidente se reunió con un grupo de simpatizantes que le esperaban en las proximidades y escuchó un tímido cacerolazo organizado por los vecinos de los edificios cercanos
Se prevé que Lula sea interrogado varias horas por el juez Sergio Moro, el magistrado que dirige la Operación Lava Jato, una trama que ha destapado uno de los mayores esquemas de corrupción de Brasil y de toda América Latina.
RAMG