POLíTICA

Papa y ONG Proactiva coinciden en humanizar el drama migratorio

El papa Francisco recibió al director de la ONG española Proactiva Open Arms, Óscar Camps, y ambos coincidieron en la necesidad de “humanizar” a la sociedad y a las autoridades ante el drama migratorio en aguas del Mediterráneo.  

“Comparte con nosotros que hay una clara fractura entre el pueblo y la clase política, quizá el pueblo tiene más solidaridad en el tema de los refugiados”, dijo Camps en declaraciones a los medios tras su reunión en el Vaticano, de unos 40 minutos de duración.

El activista señaló que el pontífice, muy concienciado sobre el drama migratorio, secundó su opinión de que es preciso “humanizar un poco más a la clase política” en este tema y le dio “absolutamente todo su apoyo” para continuar con sus misiones.

“Es cierto que ha tenido una frase que es celebre, que es ‘un problema humano y que hay que humanizar’. En pocas palabras nos está llamando inhumanos. Debemos humanizar a todo el mundo”, afirmó el director de esta organización humanitaria, que ya ha salvado a más de 17,000 inmigrantes en el Mediterráneo.

Camps explicó que su deseo era explicar al papa la situación que se vive en el mar, trasladarle los “sobrecogedores” relatos de los inmigrantes rescatados y que, por ello, escribió al Vaticano en febrero para solicitar un encuentro con el pontífice.

La respuesta fue “rápida” y por eso este sábado pudo conversar a solas con el papa, a quien debía haber visto ya en la visita de este a la isla griega de Lesbos, en abril de 2016, un encuentro que fue impedido por la policía, según relató en su comparecencia con la prensa.

Un mes más tarde, Camps acudió a la audiencia general del 25 de mayo de 2016, en la plaza de San Pedro, donde pudo entregarle el chaleco salvavidas de una niña de 6 años que murió ahogada en el mar y que el papa conserva colgado de la pared de una de sus salas de reuniones, explicó.

El socorrista de Proactiva ve en Bergoglio “un altavoz” en el mundo, una voz “disonante entre los Putin y los Trump”, declaró.

“Es el único que se yergue por encima del cargo eclesiástico que ostenta. Opina y nos reclama que seamos más humanos porque este es un problema humano y hay que volver a humanizar un poco nuestras instituciones para recuperar la confianza en ellos”, consideró.

Camps avanzó que este es “el principio de unas conversación” para “seguir profundizando en el tema y para buscar maneras en las que poder difundir” su labor y por ello aseguró que en la tarde de este sábado se reunirá además con “una persona muy próxima” a Francisco.

Todo para “sensibilizar y humanizar, para tomar conciencia de que actualmente estamos siendo testigos de un crimen, de una situación muy crítica” en el Mediterráneo, dijo.

Durante el encuentro también salieron a relucir las acusaciones de algunos sectores de la sociedad hacia las ONG, de las que dicen que pactan con las redes de tráfico de personas para poder socorrer a los inmigrantes de forma rápida, unas tesis que están siendo estudiadas por los fiscales italianos.

Camps rechazó estas acusaciones, dijo que “hay ciertas campañas de información que son muy tendenciosas” sobre las razones de los movimientos migratorios y aseguró que Proactiva seguirá salvando vidas en el Mediterráneo.

“No sabemos sus historias ni sabemos de qué huyen, pero ya les etiquetamos como inmigrantes económicos y que buscan un futuro mejor. Nadie abandona su casa porque sí. Hay un motivo y nunca se habla de este motivo”, lamentó.

Proactiva Open Arms, con sedes operativas en Lesbos y Malta, salvó durante el 2016 a un total de 16,000 inmigrantes que viajaban a Europa a bordo de barcazas y en lo que va de año, con el invierno de por medio, ya han asistido a 2,000 personas.

Camps fundó esta organización animado, según dijo, por “el respeto por la vida, por los niños y por los más vulnerables”.

“Nos preocupan las vidas de las personas, que es lo que debería preocupar a toda institución que nos represente”, dijo, para después denunciar que para los líderes políticos, en ocasiones, los inmigrantes solo son “números” sin una realidad a sus espaldas.

Para ello ha acudido ante el papa argentino, que, dijo, “tiene una opinión muy próxima” a la de las ONG y “unos valores que son fundamentales para los Derechos Humanos”.

“Necesitamos a personas y voces como la suya, porque estamos cansados de oír las voces de Trump y de Putin”, zanjó.

 

 

ramg