La Policía de Nueva Zelanda mató este jueves a tiros a un perro de seguridad del aeropuerto de Auckland que había escapado hacia la pista de despegue y provocado retrasos en varios vuelos.
El perro, un pastor escocés de 10 meses llamado Grizz y que estaba siendo entrenado en la detección de explosivos, salió corriendo hacia la pista donde estuvo unas tres horas pese a los intentos del personal de seguridad del aeropuerto para recuperarlo.
RIP Grizz, the Aviation Security dog shot at @AKL_Airport this morning https://t.co/OX7bZ3siua pic.twitter.com/8On40vmY6f
— Frank Chung (@franks_chung) 16 de marzo de 2017
La compañía encargada de la seguridad, Avsec, indicó que Grizz “se asustó” cuando intentaban subirlo de madrugada a un vehículo y que cuando lo encontraron en la pista no dejaba que nadie se le acercara, según la televisión TV3.
Avsec dijo que “lo intentaron todo” para recuperarlo, incluido comida, juguetes y otros perros.
Unfortunately an Aviation Security dog was shot this morn @AKL_Airport staff had tried for 3 hours to catch it our thoughts are with handler
— Auckland Airport (@AKL_Airport) 16 de marzo de 2017
La dirección del aeropuerto optó por ordenar a la Policía que abatiera al perro después de que su huida hubiera causado retrasos en dieciséis vuelos nacionales e internacionales.
Los perros de seguridad de Avsec están especializados en la detección de explosivos y su entrenamiento puede costar hasta unos 70 mil dólares.
FJMM