En el municipio de Ixtenco, en Tlaxcala, habitantes y seguidores del alcalde Miguel Ángel Caballero Yunca, se enfrentaron a golpes afuera de la presidencia municipal.
(Twitter@fabbi_red)
El enfrentamiento ocurrió cuando simpatizantes del alcalde llegaron al Ayuntamiento para desalojar a pobladores que mantienen tomada la Alcaldía desde el 15 de enero pasado para exigir la salida de Caballero Yunca, a quien acusan de enriquecimiento ilícito y nepotismo.
Hubo golpes, empujones y se arrojaron palos y piedras.
Al lugar también llegaron policías municipales para desalojar a los manifestantes.
“Llegan de frente y quieren abrirla, cuando vemos nosotros esas acciones, mi compañera y otra, cerramos la puerta, pero llegó un momento que ya no tuvimos la capacidad de controlar, entonces abrieron, digamos violento, de una manera violenta”, relató una habitante de Ixtenco.
Tras el enfrentamiento, los manifestantes convocaron a más habitantes tocando las campanas de la iglesia y armados con palos, arremetieron contra los policías.
Volcaron nueve patrullas municipales, dañaron cinco motocicletas de Seguridad Pública y causaron destrozos en la Presidencia Municipal.
Varios pobladores y policías resultaron lesionados.
“Nos aventaron, nos corretearon, aquí al compañero le dieron un rocazo, todo esto es por él, por Miguel Ángel Caballero Yunca”, narró otro habitante de Ixtenco.
El gobernador de Tlaxcala, Marco Antonio Mena, responsabilizó al alcalde de Ixtenco del enfrentamiento y de no alcanzar un acuerdo con los manifestantes.
“Debo ser categórico, el presidente municipal desatendió e ignoró la postura del secretario de Gobierno de mantener el diálogo, de no iniciar un conflicto, si no al revés, de distender la circunstancia a partir de pláticas”, sostuvo el gobernador de Tlaxcala.
Después del enfrentamiento, la seguridad fue reforzada en todo el municipio, pero las oficinas de la presidencia municipal continúan tomadas por los manifestantes.
Con información de Antonio Morán
LHE
