El 30 de enero fueron localizados siete cuerpos desmembrados dentro de 15 bolsas de plástico en un paraje de la colonia Maestros, de Chilapa, en la montaña baja de Guerrero.
Cinco de las víctimas eran artesanos de Veracruz y las otros dos eran los padres de una monja de la congregación religiosa encargada de la administración del colegio Morelos.
Una monjita de las guadalupanas en Chilapa, que habían secuestrado al papá, a la mamá, a la hermana, han resultado muertos en estas famosas 15 bolsas que dejaron en Chilapa”, detalló Salvador Rangel Mendoza, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa
La hermana de la monja, quien había sido secuestrada junto con sus padres, apareció muerta cuatro días después en la colonia el Calvario; el cuerpo presentaba signos de tortura y violación. Por miedo, cuatro religiosas abandonaron la escuela.
Estas religiosas eran las responsables del Colegio Morelos. Estaban haciendo un trabajo excelente. Antier vine a entrevistarme con ellas en México y definitivamente se retiran de Chilapa”, explicó Rangel Mendoza.
El Colegio Morelos es una escuela privada ubicada en la calle Revolución, a unos metros del zócalo de Chilapa, y atiende a más de 700 alumnos de preescolar, primaria, secundaria y preparatoria.
En un comunicado, la diócesis de Chilpancingo-Chilapa lamentó el secuestro y la muerte de los padres de la religiosa. También confirmó que la comunidad guadalupana a cargo del colegio se retirará definitivamente del municipio. Anunció que se buscará quien administre el plantel, ya que cerrarlo afectaría a niños y jóvenes.
Con información de Rafael Nájera
MAP
