En coordinación con el Gobierno de Guerrero y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Gobierno de Japón inició la instalación de sensores sísmicos en costas guerrerenses, con el fin de prevenir desastres naturales.
Se trata de un proyecto de monitoreo y de implementación de instrumentos para la medición y alertamiento de tsunamis, iniciado en 2015, en cuatro municipios de Guerrero.
Marco César Mayares Salvador, secretario de Protección Civil de Guerrero, informó que los sensores se instalarán en la zona costera de la entidad, “principalmente en Zihuatanejo, Coyuca de Benítez, Acapulco, Ometepec, donde se estarán colocando estos sensores para realizar mapeos, para realizar mediciones y sobre todo para poder identificar cuáles son las zonas de riesgo y de seguridad dentro de estos cerca de 500 kilómetros de playa que tiene el estado de Guerrero”.
Los instrumentos de medición, que comenzaron a ser colocados este mes, se asemejan a boyas y torres mediante los cuales se permitirá calcular la sismicidad de la región, ya que van equipados con sismógrafos con frecuencia de banda ancha, además de un sistema de Posicionamiento Global, conocido también como GPS.
Estos sensores sísmicos se van a colocar en dos partes: en la zona costera, en la zona de playa; y otra, van a ser mar adentro. Estará aquí el buque El Puma, que es de parte de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien es el propietario de este buque. Estará navegando sobre el territorio estatal para poder estar instalando este tipo de sensores”, explicó el funcionario.
El proyecto también tiene como objetivo identificar sitios que puedan servir como refugios temporales, así como las zonas con mayor potencial de afectación, en caso de una emergencia.
Con información de Janosik García.
RMT
