Luego de la inundación por el desbordamiento del Río de los Remedios, habitantes de las colonias Altavilla y San José Xalostoc, en Ecatepec, Estado de México, sacaron de sus viviendas las cosas que se echaron a perder.
Las calles, que por la madrugada estuvieron inundadas, permanecieron cerradas por colchones, salas, refrigeradores y electrodomésticos.
“Ayer cuando empezó a llover, empezó a entrar el agua, así, feo. Ya no nos dio tiempo de alzar nada, ni de guardar, ni nada, y ahorita, mire, aquí está la base, la sala, la recámara”, señaló Rosa María Lozano, damnificada de la colonia Altavilla.
Vecinos de otras colonias se solidarizaron con los damnificados.
Los vecinos informaron que el agua rebasó el metro de altura, y pidieron ayuda a las autoridades.
“Pues ya no podemos seguir viviendo esta situación de estar perdiendo nuestras cosas continuamente, casi cada año se suscitan inundaciones que sí se pueden evitar”, agregó Norma Carrillo, una vecina.
Aseguró que las autoridades no abrieron las compuertas del Río de los Remedios, lo que provocó la inundación.
La señora Catalina Casimiro, de 77 años de edad, ha vivido 50 años en la colonia San José Xalostoc.
Perdió todos los productos que vendía en una pequeña verdulería, de la cual, dijo, se mantenía.
“Mire, todo se mojó y lo demás se lo llevó el agua, tomate, jitomate, todo fue para afuera se lo llevó. Yo y mi esposo, ya estamos grandes, ya no hay de dónde. Es lo que queremos que nos apoyen como nosotros los apoyamos”, indicó una damnificada de San José Xalostoc.
Las personas que resultaron afectadas se negaron a refugiarse en un albergue instalado en una iglesia, para evitar la rapiña.
Con información de Santos Briz.
LLH
