Un juez federal bloqueó este jueves por dos semanas más la deportación de mil 400 iraquíes que están en Estados Unidos, en lo que determina si su corte es el lugar apropiado para sopesar los temores que tienen de sufrir daños físicos en caso de que sean expulsados del país.
El juez federal de distrito Mark Goldsmith extendió hasta el 24 de julio una suspensión que estaba por expirar el lunes, debido a que aún no ha determinado si su tribunal es el lugar indicado para llevar el caso presentado inicialmente por 114 iraquíes, en su mayoría cristianos, que fueron detenidos en el área de Detroit el mes pasado.
El gobierno afirma que hay mil 400 iraquíes con órdenes de deportación en todo el país. La mayoría no están detenidos.
FJMM