CRIMEN Y SEGURIDAD

Encarcelan a operador del Cártel de Sinaloa en penal de baja seguridad

El 9 de junio, miembros de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y el Ejército detuvieron en Culiacán, Sinaloa, a Jesús René Rodríguez Dueñas, alias “El Rino”, junto con otras dos personas.

“El Rino”, señalado como operador de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, organizó la emboscada contra soldados del pasado 30 de septiembre.

Jesús Gerardo Rodríguez Prado, delegado de la Procuraduría General de la República (PGR) en Sinaloa, dijo que “se ejercitó la acción penal y actualmente, (“El Rino”) está puesto a disposición del juez de Control” y preso en el penal de Aguaruto.

De este mismo penal escaparon, el pasado 16 de marzo, Juan José Esparragoza Monzón, hijo de “El Azul” Esparragoza; Javier Zazueta Rosales, “Pancho Chimal”, quien también participó en el ataque del 30 de septiembre pasado; Rafael Guadalupe Félix Núñez, “El Changuito Antrax”; Alfonso Limón Sánchez; y Jesús Peña González; estos tres últimos, operadores de “El Mayo Zambada”.

“El Rino” permanece en esa cárcel gracias a una estrategia legal similar a la que se usó con estos cinco detenidos, quienes fueron mantenidos o trasladados al penal de Aguaruto, por un amparo.

Dicha estrategia consiste en que los detenidos, en la ciudad de Culiacán, son puestos a disposición del Ministerio Público más cercano a la detención, en este caso de esa ciudad; un juez de Control califica de legal la detención y vincula a proceso al detenido en el penal de Aguaruto por 48 horas, para presentar pruebas; en este plazo, la defensa tramita y obtiene un amparo que evita el traslado a otro penal.

Gonzalo Gómez, secretario de Gobierno de Sinaloa, informó que “jueces federales de distrito les otorgan, en juicios de amparo, suspensión para que no sean trasladados a ningún otro reclusorio.

El propio Gobierno de Sinaloa ha reconocido que el penal de Aguaruto tiene deficiencias.

Genaro García Castro, secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, precisó que el penal de Aguaruto “no es de máxima o de mediana seguridad, es un penal para delincuentes del fuero común”.

Además, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reprobó su operación en el Diagnóstico Nacional Penitenciario de 2016.

 

Con información de Raymundo Pérez Arellano.

 

RMT