El fentanilo es un potente analgésico y anestésico de la familia de los opiáceos con un efecto 100 veces más poderoso que la morfina.
Se puede consumir por vía oral, inyectado o por absorción cutánea a través de parches.
Suele utilizarse para el tratamiento de dolores agudos, a menudo asociados al cáncer, pero también como apoyo e inducción de la anestesia general durante las cirugías.
Administrado con una prescripción médica correcta, el fentanilo no es peligroso, pero al producirse en laboratorios clandestinos y venderse en el mercado negro es letal.
En muchos casos, el fentanilo se consume de manera inconsciente, sin que el usuario conozca la verdadera composición de la droga que está tomando.
“También se utiliza en combinación o como sustituto de la heroína y en este caso es muy peligroso en el sentido de que es aproximadamente 50 veces más potente que la heroína, es tan peligrosa principalmente por el poder del compuesto, creo que la dosis letal es de unos tres miligramos”, explicó Mark Mogle, director de Operaciones Especiales de la División Criminal del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
En polvo, su versión más pura, el equivalente a un grano de sal basta para generar las sensaciones de euforia que provoca la heroína y sólo dos granos pueden ser suficientes para detener la respiración de un adulto y matarlo en cinco o 10 minutos.
En caso de sobredosis, los efectos son tan rápidos que los servicios de emergencia no llegan a tiempo. En ocasiones, el deceso se produce en tan sólo tres minutos.
La formulación clandestina del fentanilo puede llegar a tener un efecto letal incluso por inhalación de partículas suspendidas en el aire o al entrar en contacto con la piel.
“En Estados Unidos, los oficiales de Policía que están haciendo las pruebas de campo, están siendo alentados a saltarse las pruebas si sospechan que hay fentanilo en los medicamentos debido a los peligros de la exposición y especialmente de inhalación cuando están haciendo pruebas a las muestras, es mejor dejar que el laboratorio las analice en un entorno controlado con instrumentos de seguridad”, indicó Mogle.
México y Estados Unidos reforzarán su estrategia para combatir el comercio ilegal del fentanilo debido a que su consumo va en aumento y en los últimos años se ha convertido en una amenaza a la salud pública para ambos países.
Con información de Cynthia Marín
LHE
