Mujeres de Tasquillo, Hidalgo, sembraron plantas de maguey para conservar la especie en el Valle del Mezquital.
Mario Alberto Cortes, director de Silvicultura y Acuacultura, dijo: “Estamos sembrando la semilla que estuvo la semana pasada, sembrando un millón de plantas de shamini”.
Todo inicia en el vivero donde las 26 mujeres germinan la semilla de maguey en cajas de unicel.
Miriam Martínez, encargada de vivero de maguey en Tasquillo, Hidalgo, agregó: “Primero encharolamos, lavamos la charola, de ahí la llenamos de tierra, de ahí la traspasamos y empezamos a sembrar, mis compañeras están sembrando, de un centímetro para que no se vaya muy hasta abajo la semilla”.
Después de tres meses, el maguey es trasplantado en bolsas para pasar 18 meses cultivándose.
Por último, se planta en parcelas antes de ser entregado a los productores.
Preocupadas por la desforestación estas mujeres han puesto empeño en el rescate del maguey y con este método evitar la degradación del suelo y la pérdida parcial o total de su productividad debido al mal uso por procesos como tala, erosión o agricultura no racionada.
Julia Medina Martínez, agricultora de maguey de Tasquillo, Hidalgo, aseguró: “Me siento bien, feliz porque contribuimos a que no desaparezcan las especies y sigan reproduciéndose más día a día”.
Mario Alberto Cortes, director de Silvicultura y Acuacultura, comentó: “Las mujeres desde hace 15 años vienen colaborando y no han dejado su actividad en el maguey”.
Datos de la Secretaría de Agricultura en Hidalgo revelan que de las 250 mil hectáreas de plantaciones de maguey hoy sólo quedan 36 mil hectáreas en toda la entidad.
Se espera que a finales del 2017 sean reforestadas tres millones de plantas de maguey.
Con información de Bertha Alfaro
LSH
