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Doña Trini, de 74 años de edad, ha atendido más de 200 nacimientos en 58 años que lleva como partera tradicional.
La consideran como ‘la abuela’ de más de 20 localidades cercanas al municipio de Comitán, Chiapas.
Principalmente atiende a mujeres de escasos recursos, mujeres alejadas de los hospitales, pero sobre todo mujeres que la conocen y han sido testigos de su desempeño.
A unos metros de su casa acondicionó un espacio como consultorio para atender a sus pacientes.
La partera mide la cintura a las mujeres embarazadas para saber cuánto tiempo les falta para dar a luz.
Con un instrumento antiguo ubica el corazón del bebé y escucha los latidos.
La partera sabe cuándo es el momento y se prepara para recibir a los recién nacidos.
En caso de alguna complicación, doña Trini canaliza a las embarazadas a la Unidad Médica Rural “Rosario Yocnajab”.
María Cristina, testigo del trabajo de Trini, dijo que cuando tuvo sus hijos ninguno se le murió; antes se morían las señoras en los hospitales, pero desde que la partera empezó a trabajar nunca se le ha ido ni uno.
Doña Trini logró el sueño de recibir su certificado de primaria hace 2 años. Aprendió a leer y escribir al lado de niños menores de 13 años; se graduó con ellos. Además, consiguió certificarse a través del IMSS-Prospera para mejorar la atención en salud materna y planificación familiar.
Su máximo deseo es contagiar ese espíritu de lucha y superación a las nuevas generaciones.
Con información de Farah Reachi.
BLR
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