Como si fueran boxeadores antes de una pelea, los republicanos se dieron ánimo con las canciones ‘Eye of the Tiger’ de Survivor y ‘Takin’ Care of Business’ de Bachman-Turner Overdrive antes de aprobar un proyecto para desmantelar la ley de seguros de gastos médicos del expresidente Barack Obama (Obamacare).
“Na na na na, na na na na, hey hey hey, adiós”, cantaron alegremente, convencidos de que los republicanos que respaldaron el nuevo proyecto de ley pagarán un precio político en las elecciones legislativas, lo que podría costarle al Partido Republicano la mayoría de la que goza ahora.
“¡Llénense de orgullo por lo que obtuvieron!”, gritó el representante demócrata Joe Crowley, de Nueva York, mientras el coro de la canción de la década de 1960 se extendía por toda la bancada demócrata en la cámara baja.
Horas antes, los líderes republicanos estaban decididos a conseguir el apoyo de las bases del partido después del desastre de hace seis semanas, cuando abruptamente tuvieron que retirar la propuesta del pleno de la Cámara de Representantes. Habían pasado semanas, días y horas presionando a los republicanos renuentes a que respaldaran el proyecto de ley que incluye recortes al programa gubernamental Medicaid de apoyo a los pobres, elimina las multas ordenadas por Obama a la gente que no adquiera seguro médico, y proporciona subsidios más reducidos en general.
Analistas en el Congreso calculan que, si el proyecto se convierte en ley, 24 millones de estadounidenses más estarán sin seguro para 2026, incluidos 14 millones el próximo año.
En una ruidosa reunión a puerta cerrada el jueves por la mañana, hubo ruegos mezclados con groserías de parte de algunos legisladores para lograr que los renuentes respaldaran el proyecto. Los republicanos temían que, de no cumplir la promesa que han repetido desde hace siete años de revocar la ley de Obama, ello haría enfurecer a sus electores.
FJMM