ESTADOS UNIDOS

Mattis afirma que Rusia arma al talibán en Afganistán

Estados Unidos deberá confrontar a Rusia por proveer armas al Talibán para usarse contra fuerzas respaldadas por Estados Unidos en Afganistán, informaron militares estadounidenses este lunes.

El general John Nicholson, en conferencia de prensa con el secretario de Defensa Jim Mattis, dijo que no ofrecería detalles sobre la participación de Rusia en Afganistán. Sin embargo, dijo que “no refutaría” que el involucramiento de Moscú incluye proporcionar armas al Talibán.

Previo a eso, un alto funcionario militar de Estados Unidos le dijo a la prensa que Rusia ha proporcionado armas automáticas. El Talibán utiliza las armas en las provincias sureñas de Helmand, Kandahar y Uruzgan, según el funcionario, quien informó a la prensa sobre información de inteligencia con la condición de permanecer en el anonimato.

Rusia niega ofrecer dicho apoyo al Talibán, que gobernó a Afganistán hasta la invasión dirigida por Estados Unidos del 2001. Rusia agregó que los contactos se limitan a la protección y a hacer que los rígidos fundamentalistas religiosos se reconcilien con el gobierno, algo que Washington no ha logrado desde hace años. Rusia también ha promovido aligerar las sanciones a los líderes del Talibán que cooperen.

Al preguntarle sobre la actividad rusa en Afganistán, donde participó en una sangrienta guerra en la década de los 1980 y se retiró tras ser derrotado, Mattis hizo alusión a las crecientes preocupaciones de Estados Unidos.

“Nos involucraremos con Rusia diplomáticamente”, dijo Mattis. “Lo haremos donde podamos, pero tendremos que confrontar a Rusia en que lo que hacen es contrario a la ley internacional o negar la soberanía de otros países”.

“Por ejemplo”, Mattis le dijo a la prensa en la capital afgana, “cualquier arma canalizada aquí de un país extranjero sería una violación a la ley internacional”.

Mattis está en Kabul para evaluar la guerra más larga de Estados Unidos mientras el gobierno de Donald Trump debate enviar más tropas estadounidenses. La visita se produce tres días después de un ataque talibán a una base de ejército afgano en el norte del país que causó al menos 100 muertos, y hasta 130 según algunas estimaciones.

Para Mattis, Kabul es la última parada de una gira que lo llevó a seis países en una semana. El jefe del Pentágono busca reforzar las relaciones con aliados y socios y obtener información sobre el estancado conflicto en Afganistán.

Mattis es el primer miembro del gobierno de Trump que visita Afganistán. El máximo comandante estadounidense en Kabul, el general John Nicholson, dijo recientemente al Congreso que necesita varios miles de solados más.

Como parte de las evaluaciones que Washington está haciendo sobre su estrategia en Afganistán, el asesor de seguridad nacional H.R. McMaster visitó Kabul la semana pasada para deliberar con Nicholson y funcionarios afganos.

McMaster dijo en una entrevista televisiva, al regresar a Washington, que Estados Unidos en tiempos recientes había reducido sus esfuerzos en la campaña contra el Talibán. “Nuestro enemigo se dio cuenta de ello y ha redoblado sus esfuerzos, y es hora de que nosotros, hombro a hombro con los camaradas afganos, respondamos”.

La pregunta para el gobierno ahora es cómo seguir presionando al Talibán y mantener las medidas antiterroristas en Afganistán sin verse empantanado en un multimillonario conflicto sin fin financiado por los contribuyentes.

HVI