La Federación de la Industria Alemana (BDI) comunicó que, si bien el discurso del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ante el Congreso se llevó a cabo en un tono conciliatorio, en el que reconoció a la OTAN, no hay ninguna razón para bajar la guardia.
El presidente de la BDI, Dieter Kempf, señaló que “el presidente sigue ahorrando detalles sobre su política económica, así como sobre la reforma tributaria”.
El representante de la industria alemana declaró que “la intención de Trump de introducir aranceles, así como el proteccionismo que hay detrás de su lema ´Estados Unidos primero´ pondría en peligro en todo el mundo cadenas de generación de valor, frenaría la innovación y encarecería la producción”.
El alto ejecutivo apuntó que eso costaría bienestar y oportunidades, y que eso también se dejaría sentir en Estados Unidos.
“Las empresas alemanas hacen una importante contribución al fortalecimiento de la industria y de los puestos de trabajo en Estados Unidos”.
El empresariado alemán reaccionó hasta ahora con gran preocupación por lo que se sabe de los planes económicos y fiscales del nuevo presidente de Estados Unidos.
La economía alemana es ampliamente abierta al comercio exterior y las ideas de Trump son diametralmente opuestas a ésta. El empresariado alemán vio con preocupación y reserva la elección de Donald Trump y esa reacción no ha variado debido a la escasa información sobre sus proyectos para la economía, así como a sus exabruptos.
El gremio cúpula de la industria alemana destacó en su editorial de este miércoles que aranceles, así como la discriminación de ofertadores extranjeros en Estados Unidos para las licitaciones “afectarían duramente a la economía alemana”.
“Con mayor razón nos debemos poner en favor de mercados más abiertos e inclusivos, así como el establecimiento de una gobernanza económica global y multilateral
“En conjunto con nuestras 36 asociaciones empresariales y las cien mil empresas de la industria alemana que son nuestros miembros, queremos colocar nuevos impulsos en favor de mayor crecimiento y empleo. Queremos continuar fortaleciendo y profundizando las relaciones económicas trasatlánticas”.
“Y queremos fomentar la estructuración de la globalización teniendo como fundamento los valores occidentales”, destacó al BDI sobre el tema del presidente Trump y lo que se sabe de sus proyectos económicos.
Ese gremio industrial señaló que los países de la Unión Europea deben posicionarse claramente en favor de la apertura y la globalización. Sin embargo, justamente ese sentir no es del todo compartido por los países de la UE.
En el análisis que dio la BDI se comentó que el gabinete de Trump está en gran parte formado por individuos sin experiencia política, y que sus competencias son poco claras
El giro proteccionista en Estados Unidos coloca a las dos naciones exportadoras, Alemania y China, ante grandes desafíos, se puso de relieve.
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