“Hacemos un llamamiento a Rusia y a las fuerzas separatistas que apoya para que respeten de inmediato el alto el fuego, retiren todas las armas pesadas y permitan un acceso pleno y sin restricciones a los observadores de la OSCE”, dijo en un comunicado, el portavoz interino del Departamento de Estado, Mark Toner.
El Departamento de Estado también condenó el ataque del viernes de fuerzas separatistas rusas contra un grupo de observadores de la OSCE que se encontraban en el norte de la ciudad de Donetsk y a los que se les incautó un vehículo aéreo no tripulado, es decir, un dron.
“Estados Unidos está vigilando de cerca la creciente violencia en el este de Ucrania de las últimas semanas y el continuo fracaso de las fuerzas separatistas rusas para respetar el alto el fuego recogido en los acuerdos de Minsk”, añadió en su comunicado Toner.
No obstante, dejó la puerta a la posibilidad de que Estados Unidos levante las sanciones impuestas a Moscú a pesar de que persistan las violaciones al alto el fuego.
Trump ha subrayado su voluntad de cooperar con Rusia en la lucha contra el Estado Islámico (EI), y en enero sugirió que podría poner fin a las sanciones contra Moscú por la injerencia en Ucrania a cambio de un nuevo recorte en los arsenales nucleares de ambos
Esa ambigüedad ha llevado a Francia y Alemania, que también impusieron sanciones a Rusia dentro de la Unión Europea (UE), a subrayar que el levantamiento de las restricciones solo se debe plantear en la medida en que haya progresos rusos en el cumplimiento de los acuerdos de Minsk sobre el conflicto en el este de Ucrania.
RAMG
