CORRUPCIóN

Duterte ordena al Ejército limpiar a la policía de Filipinas

El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ordenó al Ejército detener a los policías corruptos, después de que suspendiera temporalmente su polémica guerra contra
las drogas por la muerte de un empresario surcoreano a manos de agentes.

En un discurso ante generales en el palacio presidencial de Malacañán, Duterte explicó que mientras limpia el cuerpo policial y reorganiza la aplicación de la ley antidroga, los militares se encargarán de arrestar a los agentes corruptos.

Yo ordenaré los arrestos (…) si no participas, estoy acabado. Nadie va a perseguir a los policías malos. La cultura de corrupción es profunda en la Policía”, dijo el mandatario.

La medida surge dos días después de que Duterte declarara suspendida la campaña antidroga que comenzó el mismo día de su investidura, el 30 de junio de 2016, y que lleva desde entonces más de 7,000 supuestos delincuentes y drogadictos muertos, la mayoría a manos de grupos civiles que se han tomado la justicia por su cuenta.

La reorganización de la Policía responde al escándalo que ha causado el descubrimiento de que presuntos agentes se escudaron en la campaña contra las drogas para secuestrar y después asesinar al empresario surcoreano Jee Ick-joo el pasado octubre.

Jee murió asfixiado en Campo Crame, la sede de la Policía Nacional, situada en Quezón, la mayor de las 15 poblaciones que crecen a la sombra de la capital y que forman Metro Manila.

La muerte del surcoreano en octubre salió a la luz este mes y ha suscitado fuertes críticas a la política antidroga de Duterte, además de poner en evidencia la corrupción en las fuerzas de seguridad.

El presidente aseguró el domingo pasado que primero eliminará la corrupción en los cuadros policiales y luego reanudará la “guerra contra las drogas” hasta el final de su mandato, en 2022, y no solo por el plazo de un año, como había anunciado anteriormente.

HVI