ESTADOS UNIDOS

Tillerson califica de ‘risibles’, reportes de que Casa Blanca busca su remplazo

El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, dijo hoy que la información en prensa sobre su posible despido en semanas o meses es “risible” y evitó aclarar si ha conversado sobre este asunto con el presidente, Donald Trump. “Es risible, es risible”, afirmó tras ser preguntado por cómo se está gestionando este tema y qué va a hacer ante las informaciones de que, según señaló un periodista, “algunos en la Casa Blanca dicen que quieren que dimita”.

Esas han sido las primeras y únicas palabras del jefe de la diplomacia estadounidense después de que ayer el diario The New York Times publicara, con fuentes anónimas, que Trump quiere reemplazar a Tillerson por el actual director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Mike Pompeo. Esa información fue confirmada después, con fuentes propias también anónimas, por numerosos medios estadounidenses, entre ellos la CNN o The Washington Post.

Tillerson hizo esas breves afirmaciones sobre el tema mientras daba la bienvenida al Departamento de Estado al primer ministro libio, Fayez al-Sarraj.

Ayer, la portavoz del Departamento, Heather Nauert, dijo que el jefe de gabinete de la Casa Blanca, el general John Kelly, le aseguró a Tillerson que son falsas las informaciones de prensa sobre que Trump prevé despedirle en semanas o meses.

Preguntada con insistencia por este asunto en su rueda de prensa diaria, Nauert defendió que a Rex Tillerson “le gusta su trabajo”, tiene “mucho trabajo por hacer”, mantiene “su agenda completa” y tuvo ese día dos reuniones con Donald Trump con total normalidad.

Hoy ambos volverán a mantener un encuentro, esta vez con el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, según la agenda oficial de la Casa Blanca. No obstante, Nauert recordó ayer que “el secretario sirve a voluntad del presidente” y subrayó que continuará desempeñando su trabajo “hasta que el presidente desee”.

“Está comprometido con su trabajo, le apasiona hablar con líderes extranjeros, avanzar en los objetivos políticos de Estados Unidos y su agenda no ha cambiado”, indicó.

Preguntada sobre si Tillerson “luchará por mantener su puesto tras estos rumores”, la portavoz prefirió “no entrar en especulaciones”. Sí reconoció que hay “áreas de desacuerdo político” entre Trump y su secretario de Estado que son “conocidas” y puso como ejemplo sus posturas divergentes sobre el cambio climático.

En una rueda de prensa paralela, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, evitó responder ayer con un “sí” o “no” a la pregunta de si Trump tiene confianza en Tillerson. “Cuando el presidente pierda su confianza en alguien, esa persona ya no servirá en el cargo en el que está”, se limitó a decir Sanders.

Acerca del futuro de Tillerson, Sanders dijo que “ahora mismo, es seguir trabajando duro como secretario de Estado en las prioridades” de Trump. El trabajo del secretario de Estado dentro de la Administración lleva meses en el aire, en medio de continuos rumores sobre su posible salida a causa de sus diferencias con el presidente.

El pasado octubre, Tillerson se vio obligado a negar públicamente que estuviese pensando en dimitir ante la insistencia de esas informaciones.

Con información de EFE

MLV