El conductor de un camión que llevaba docenas de inmigrantes, de los cuales 10 murieron como consecuencia del sofocante calor de Texas en julio, se declaró culpable de tráfico de personas y podría afrontar una condena de cadena perpetua, informaron este lunes los fiscales.
James Bradley Jr., de 61 años, se declaró culpable de un cargo de conspiración para trasladar extranjeros seguido de muerte, informó en un comunicado la fiscalía del Distrito Occidental de Texas. La audiencia para conocer la sentencia tendrá lugar en enero.
Bradley dijo a los investigadores que fue tomado por sorpresa cuando el 23 de junio abrió las puertas del acoplado frente a una tienda de Walmart en San Antonio (Texas), y fue derribado por un grupo de hispanos que salían de allí, de acuerdo al testimonio registrado en el caso.
“La admisión de culpabilidad hoy del Sr. Bradley ayuda a cerrar la puerta sobre uno de los responsables de causar la trágica pérdida de vidas humanas y el estrago causado en aquellos que sobrevivieron a este horroroso incidente”, dijo en un comunicado Shane Folden, agente especial de la unidad investigativa del Departamento de Seguridad Nacional.
Con información de Reuters.
FJMM