ESTADOS UNIDOS

Merkel y Macron piden a la UE endurecer sanciones contra Corea del Norte

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, condenaron en un comunicado conjunto el nuevo ensayo nuclear norcoreano, al tiempo que se pronunciaron por un endurecimiento de las sanciones de la Unión Europea (UE) contra Pyongyang.

Corea del Norte ha “pisoteado el derecho internacional”, ante lo que se impone una reacción decidida y unitaria ante este hecho, lo que implica tanto a las Naciones Unidas como a la UE, apunta el texto, difundido por la Cancillería alemana, tras una comunicación telefónica entre Macron y Merkel.

En términos parecidos se pronunció el ministro de Asuntos Exterior alemán, Sigmar Gabriel, asimismo a través de una nota de su departamento, donde mostró su confianza en que habrá una reacción cohesionada a escala de la UE y la ONU.

La prueba realizada es “una vulneración flagrante del derecho internacional”, apuntó el titular de Exteriores, donde anuncia que se abordará “con nuestros socios de la UE la reacción a adoptar”.

El sexto test detectado hoy por los organismos sismológicos de Corea del Sur, Japón y China, así como por la Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO), indica fue mucho más potente que los anteriores.

LONDRES DEFIENDE SANCIONES A PYONGYANG

El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, defendió la vía de las sanciones para abordar la crisis abierta con Corea del Norte, aunque subrayó que “todas las opciones” están abiertas tras el nuevo ensayo nuclear de Pyongyang.

“Nuestra visión en el Reino Unido es que los medios pacíficos y diplomáticos son la mejor opción. Pensamos que la ruta de las sanciones todavía tiene potencial”, dijo Johnson a la cadena “Sky News”.

El ministro británico argumentó que China es responsable del 90% del flujo comercial de Corea del Norte y que Pyongyang tan solo cuenta con “reservas de petróleo para unos seis meses”, por lo que ve “espacio para continuar metiendo presión sobre el régimen” norcoreano.

“Ninguna de las opciones militares es buena. Es correcto decir que todas las opciones están sobre la mesa, aunque no vemos una solución militar sencilla”, dijo Johnson, que alertó de que la detonación de una bomba de hidrógeno por parte de Corea del Norte puede suponer una “amenaza de un nuevo tipo”.

Johnson calificó de “temerario” el test norcoreano, el sexto ensayo atómico y el segundo termonuclear del régimen de Kim Jong-un, y urgió a que el “sentido común” prevalezca en esta crisis.

“En los treinta años de historia en los que Corea del Norte ha tratado de conseguir armas nucleares ha habido momentos difíciles y momentos en los que han vuelto a retroceder. Estamos trabajando para ver si podemos lograr algo de sentido común”, agregó.

El titular de Exteriores británico llamó a intensificar los esfuerzos diplomáticos internacionales y urgió a Pekín a incrementar la presión sobre Pyongyang.

“Lo que dicen siempre los chinos es que existe una especie de equivalencia entre los ejercicios militares estadounidenses y surcoreanos con los test nucleares de Corea del Norte”, dijo el ministro.

“Nosotros no aceptamos eso. Lo que hacen los surcoreanos es completamente legítimo. Es pacífico y se ha hecho durante años. No representa una provocación ilegal”, afirmó.

HVI