“Voy a hacer una predicción, creo que él va a estar bien, ¿de acuerdo?”, dijo Trump durante un mitin en Phoenix, Arizona.
El presidente adelantó hace unos días que estaba “considerando seriamente” perdonar a Arpaio y se rumoreaba que podía aprovechar el acto de hoy en Arizona, cuna del exalguacil, para anunciarlo, aunque finalmente optó por no hacerlo.
“No voy a hacerlo (indultarlo) esta noche porque no quiero crear ninguna controversia, pero Joe puede sentirse bien”, añadió el presidente, dando por hecho que el perdón llegará próximamente.
La jueza determinó que el exsheriff, de 85 años, es culpable de desobedecer intencionadamente las órdenes de la Justicia en un caso de discriminación racial hacia los conductores hispanos, del cual fue hallado culpable cuando aún ejercía el cargo.
Arpaio, cuya sentencia se espera el próximo 5 de octubre, podría afrontar hasta seis meses de cárcel.
Su labor logró notoriedad pública cuando estableció la polémica cárcel de la “Ciudad de las Carpas”, donde los reos cumplen sus condenas al aire libre y soportan las extremas temperaturas del desierto de Arizona.
Sus continuos operativos en contra de los inmigrantes indocumentados le dieron fama a nivel nacional e internacional, convirtiéndolo en un símbolo de la lucha contra la inmigración irregular.
FJMM