Cada año, durante la temporada de lluvias, habitantes de viviendas ubicadas en los márgenes del río Huacapa en Chilpancingo, Guerrero, se encuentran en riesgo de inundaciones.
El río, que cruza de extremo a extremo la ciudad, desbordó en septiembre del 2013 tras el paso de los huracanes Manuel e Ingrid, provocando severos daños, sobre todo, en asentamientos irregulares edificados muy cerca del cauce.
Marco César Mayares, secretario de Protección Civil de Guerrero, dijo: “Son terrenos bastante complicados por la cuestión de laderas inestables, bastante complicados por la gran cantidad de barrancas que atraviesan el municipio de Chilpancingo”.
En el fraccionamiento Don Eli, ubicado a la salida sur del río, aún hay huellas de los destrozos que provocó a su paso.
Ruth Ramírez, habitante de zona de alto riesgo, agregó: “En una ocasión el río llegó cerca de las casas”.
Pese al llamado de las autoridades a desalojar las zonas en alto riesgo, las familias afectadas, se niegan abandonar sus viviendas.
Marco César Mayares, secretario de Protección Civil de Guerrero, destacó: “En Chilpancingo ha habido reubicación de personas que habitan las zonas de laderas inestables o de barrancas y, lamentablemente, uno, dos meses, y se regresan nuevamente a asentarse en las márgenes de los ríos”.
Ruth Ramírez, habitante de zona de alto riesgo, comentó: “Ahora sí que es lo único que tiene uno. Ni modo que se vaya”.
En Chilpancingo, según datos de la Secretaría de Protección Civil de Guerrero, aproximadamente entre cuatro mil y cinco mil personas viven en zonas de alto riesgo.
Con información de Janosik García
LSH
