Consumidores venezolanos denunciaron que la escasez de alimentos en el país llegó a situaciones tan alarmantes que para conseguir productos de primera necesidad hay que viajar hasta la ciudad colombiana de Cúcuta, en el Departamento de Santander.
“Todos los productos que distribuye la red de mercados oficiales (Mercal) se consiguen en esa localidad, aunque a muy elevados precios, señaló la presidenta de la Cooperativa Mirandina de Alimentos (COMIDA), Rosa Quintana.
Quintana dijo que desde hace tiempo los productos que importa Mercal dejó de llegar a los hogares venezolanos y fueron a parar a los anaqueles de los abastos y supermercados de Cúcuta, hasta donde hay que viajar para poder adquirirla.
“En vista de ello formamos una cooperativa de consumo y todos los meses un grupo numeroso de mujeres junta nuestro dinero y nos trasladamos a Cúcuta para adquirir los productos de la dieta básica en grandes cantidades y luego nos la repartimos, explicó.
Detalló que, en esa ciudad, cerca de la frontera binacional, se puede comprar arroz, caraotas (fríjol), azúcar, aceite, pastas, mantequilla, harina, avena, leche en polvo y enlatados, productos cuya ausencia en Venezuela es notoria.
Refirió que en todo el país se están formando cooperativas de consumo para ir a Colombia a comprar alimentos importados o fabricados en Venezuela, a un precio superior, lo que en su opinión resulta un gran negocio para quienes se dedican al comercio de víveres.
“Estas cooperativas se formaron a raíz de que el presidente Nicolás Maduro encargó a los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) la distribución y venta de los alimentos, ya que desde ese momento los mismos comenzaron a desaparecer, se quejó.
Quintana agregó que las pocas bolsas con alimentos subsidiados que vendieron los CLAP, tenían fallas, ya que no contenían los productos que en ella se especificaban. “Por ejemplo la leche, el pollo, la harina y el aceite comestible, eran extraídos de la mismas, señaló.
“Es decir, allí se formó una corrupción gigantesca y el contrabando de extracción hacia Cúcuta se intensificó, al extremo que ahora tenemos que viajar a esa ciudad para comprar productos que importó el Gobierno de Venezuela y que ‘manos invisibles’ sacaron del país, aseveró.
La presidenta de la cooperativa dijo que a los supermercados venezolanos se les prohibió la venta de alimentos subsidiados, esto sumado a que los llamados CLAP desvían los productos hacia Colombia, ha acentuado aún más el problema del acceso a los alimentos en este país.
Los controles de precios, vigentes desde 2003, también contribuyeron a la fuga de alimentos, que vieron por años congelados sus precios de venta, a pesar del aumento de los costos de producción.
FJMM
