En la Ciudad de México, 72% de las instituciones de educación básica que este miércoles reanudan labores son particulares.
Los dueños realizan por su cuenta el dictamen de seguridad estructural que exige la SEP y denuncian abusos por parte de los directores responsables de obra, quienes les piden hasta 40 mil pesos.
La apertura de escuelas y el regreso a viviendas afectadas se dificulta debido a que no hay suficiente personal que haga revisiones y firme los dictámenes.
Dulce, Lourdes y Martha son dueñas de escuelas particulares. Aseguran que ningún Director Responsable de Obra (DRO) voluntario se acercó para hacer la revisión. Por su cuenta contrataron a un experto.
Dueños de escuelas denuncian abusos en emisión de dictámenes de seguridad estructural. (Noticieros Televisa)
“Todos los particulares por nuestra cuenta realizamos el pago. El DRO ya hizo la revisión de las instalaciones que solo venimos a convalidar la información para que aparezcamos en los listados”, explicó Dulce Carolina López Morales, dueña de kínder en Iztapalapa.
“Venimos a documentar el permiso que nos pide la SEP para poder empezar clases”, señaló Lourdes López Mantecón, dueña de un jardín de niños.
“Se hizo el esfuerzo porque los padres de familia requieren el servicio. Nos dicen que mañana o pasado mañana podemos empezar a laborar”, confirmó Martha Irene Villalobos Mendoza, dueña de colegio.
Aseguran que fue difícil encontrar a un DRO disponible, peor aún, encontrar a uno que no quisiera sacar ventaja de la emergencia.
“Ahora se están mandando todos, unos están cobrando 10 a otros he escuchado que 40, 15, 20. A nosotros particulares lo estamos resolviendo por nuestra parte, nadie nos está ayudando”, enfatizó Lourdes.
“Sí ha sido un gran esfuerzo porque se nos notifica que tenemos que tener el dictamen el día viernes y conseguir al perito si fue de labor y la gente se dejaba pedir mucho dinero, hasta conseguir a uno que pudiéramos pagar”, dijo Martha.
De las 768 instituciones educativas que reanudan labores hoy, 492 son escuelas particulares de educación básica, media superior y superior.
Dueños de escuelas denuncian abusos en emisión de dictámenes de seguridad estructural. (Noticieros Televisa)
En la Ciudad de México sólo hay mil 200 expertos certificados por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda que pueden firmar un dictamen de seguridad estructural. Dictamen que necesitan las 8 mil 700 escuelas de la ciudad y todos los edificios dañados.
En eso trabajan aquí, en el Colegio de Arquitectos, donde se han recibido más de 8 mil solicitudes para la revisión de inmuebles.
La delegación más afectada es Cuauhtémoc. Según su estadística, el segundo lugar ya no es Benito Juárez.
“Iztapalapa está subiendo tanto porque más que esperar a que nos diga, nosotros estamos enviando ahí a identificar daños”, explicó Oscar Sanginés, vicepresidente del Colegio de Arquitectos de la CDMX.
Sobre los edificios colapsados, Óscar Sanginés asegura que son construcciones anteriores al terremoto del 85.
“Estuvieron construidos dentro de norma, en su momento, en los 70’s. A partir del 85 toda la norma cambió. Son muy pocos los edificios nuevos que han caído, hablemos cerca del 3 por ciento”, señaló Sanginés.
Del total de viviendas dañadas, 8 de cada 10 tienen afectaciones menores.
“La prioridad absoluta son los verdes o los amarillos, porque lo que quisiéramos es que los que tienen cierto miedo dejen de tenerlo y se vuelvan a meter a sus edificios”, confirmó Horacio Urbano, presidente de Centro Urbano.
Pablo Andrés es el administrador de un edificio de la colonia Cuauhtémoc. La sacudida del martes pasado dañó seriamente acabados y muros divisorios.
Dueños de escuelas denuncian abusos en emisión de dictámenes de seguridad estructural. (Noticieros Televisa)
Ayer, un DRO voluntario del Colegio de Arquitectos firmó el predictamen.
“Estos dictámenes dan seguridad al edificio porque ya te dan un respaldo que tu vivienda está totalmente segura, ya fue revisada y ya tiene validez de que no se te va a venir encima. Edificio con daños superficiales en muros, acabados, sin presentar daños estructurales, requiere arreglo cosmético y al final firma el DRO, el que vino”, concluyó Pablo Andrés Hernández, administrador del edificio.
Con información de Ana Lucía Hernández
KAH
