La joven Karla María Cepeda sobrevivió al derrumbe de su edificio en las calles de Gabriel Mancera y Escocia, acompañada de su madre, su abuela y su perro.
Karla fue de las primeras en salir de los escombros, horas después del sismo.
De repente, empecé a ver cómo caía mi casa… Lo que hice fue agarrar a las dos y cubrir a mi perro con mi cuerpo y quedamos justo abajo de un muro… Les dije que si se podían mover. Me dijeron que sí… Mi mamá no quería salir. Le dije no, no es momento de morir. Hoy no nos vamos a morir”, relató Karla.
La sobreviviente comentó que que uso su cabeza para abrirse paso, “empecé a golpear todos los muros como loca… Mi edificio estaba en el cuarto piso y caímos hasta abajo… Empecé a gritar mientras les abría paso a mi abuela y a mi mamá. Empecé a gritar ayuda, ayuda, ayuda”.
Adela Peralta, de 87 años de edad, tuvo que esperar un poco más. Ella estaba en la planta baja del edificio derrumbado, en Rancho de los Arcos número 32, en la colonia Girasoles. No se podía mover y pacientemente esperó a que la rescataran los Bomberos.
Primeramente hicieron un hoyo de mi lado izquierdo y entonces sentí una lámpara y una voz que me decía: ‘Señora no se mueva de aquí, por favor, porque ya la vamos a sacar, pero por favor no se mueva’. Entonces yo pensé: ‘No hay manera de moverme. Cómo me voy a mover, sino puedo ni levantarme'”, narró.
La señora Adela fue trasladada a un hospital donde pudo “saborear lo que es estar alimentada”.
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Con información de Alan Pérez.
RMT
