El proyecto de transformación y rehabilitación de la Plaza de la Constitución lleva un avance general del 56 por ciento.
Ya han sido colocados 12 mil 200 metros cuadrados de concreto hidráulico, material que será la nueva base peatonal de la plancha del Zócalo.
“Primero demolemos todo el material anterior y escarbamos hasta 50 centímetros de profundidad, posteriormente se renivela el terreno y se cuelan 35 centímetros de un relleno fluido que es un concreto digamos que nos ayuda a nivelar y a darle uniformidad a toda la superficie y posteriormente colocamos el concreto MR45 que es el acabado final que tendrá la nueva plancha”, explicó Edgar Tungüi, secretario de Obras y Servicios de la Ciudad de México.
Alrededor de 90 trabajadores realizan los trabajos de acabado arquitectónico en los cuadrantes poniente y central.
Las actividades consisten en el busardeado de la plancha, proceso que permite darle una textura rugosa; el marcado de losetas de dos por dos metros cuadrados y el biselado para suavizar los extremos de las piezas.
Anteriormente la plancha del Zócalo contaba con una superficie de 20 mil metros cuadrados; con esta remodelación se ampliará a 22 mil metros cuadrados y tendrá un nuevo sistema de drenaje.
“Estamos metiendo un sistema nuevo de drenaje, de hecho, le estamos aumentando el área de recaudación de agua pluvial, pero además estamos colocando un sistema de anclaje de tal forma que cada vez que haya un evento, las carpas que se utilicen, utilicen éste sistema de anclaje y no tengan que romper la plancha del Zócalo“, agregó Edgar Tungüi, el secretario de Obras y Servicios de la Ciudad de México.
En horario nocturno se aplica el relleno fluido y concreto hidráulico para evitar que la entrada de tolvas con material afecte el tránsito vehicular.
Las labores también incluyen el lavado total de la plaza para aplicar el sellador, sustancia que protegerá la superficie y le dará su color final.
Con información de Cynthia Marin
LHE
