CRIMEN Y SEGURIDAD

Rusia apelará fallo sobre toma de rehenes de Beslán en 2004

El portavoz del Kremlin expresó su oposición este jueves a la conclusión de la Corte Europea de Derechos Humanos de que Rusia no protegió adecuadamente a las víctimas de una toma de rehenes en una escuela en 2004. Más de 300 personas murieron en el asedio en la localidad de Beslán.

Las autoridades no tomaron medidas preventivas suficientes para salvar vidas, indicó en un veredicto la corte, con sede en Francia.

El hecho de que las fuerzas de seguridad rusas emplearan cañones de tanque, lanzagranadas y lanzallamas contribuyó a las bajas entre los rehenes, indicó el tribunal. Además, no se aumentó la seguridad antes del ataque a pesar de las amenazas inminentes contra escuelas de la zona.

Agresores islamistas radicales armados asaltaron la escuela el primer día de clases, provocando un largo asedio que terminó con explosiones y disparos.

La corte ordenó que Rusia pague casi tres millones de euros como compensación total a los 409 rusos que llevaron el caso ante el tribunal. Entre los demandantes hay personas que fueron rehenes, resultaron heridas o son familiares de víctimas.

El Ministerio de Justicia anunció que apelaría el veredicto, alegando que los jueces no habían calibrado la gravedad de la situación durante el asedio ni detalles sobre los esfuerzos emprendidos para liberar a los rehenes.

“Una evaluación tan hipotética es difícilmente aceptable”, dijo a la prensa Dmitry Peskov, portavoz del presidente de Rusia, Vladimir Putin, poco después de que se conociera el fallo.

“Se tomarán todas las medidas legales necesarias en relación a este veredicto”, añadió.

La líder del grupo Madres de Beslan, Aneta Gadieva, dijo que la indemnización ordenada era escasa.

“Alguien recibirá cinco mil euros, alguien recibirá 20 mil euros. Es una suma pequeña en comparación con los daños morales”, dijo en declaraciones recogidas por la agencia estatal de noticias Tass.

El líder rebelde checheno Shamil Basayev reclamó haber organizado el asalto a la escuela. El suceso ocurrió en un periodo especialmente violento de la insurgencia islamista relacionada con los combates entre fuerzas rusas y separatistas chechenos.

Una semana antes del ataque, agresores suicidas derribaron dos aviones rusos de pasajeros en la misma noche, matando a 90 personas, y un suicida mató a 10 personas al inmolarse ante una estación del tren subterráneo de Moscú.

LSH