Bomberos de México y Argentina llegaron este viernes a Chile para ayudar a combatir los incendios forestales más devastadores en la historia del país, que han dejado hasta ahora 11 muertos.
En los próximos días se sumarán a las labores brigadistas de Portugal, Francia, Perú, Brasil, España y nuevos aviones.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, señaló que el contingente de ayuda internacional permitirá incorporar a más de 400 personas a los miles de bomberos, militares y brigadistas chilenos que luchan contra las llamas desde hace más de una semana.
El fuego no da tregua y aún hay 119 incendios activos en todo el territorio chileno, de los cuales 65 están en combate, 53 han sido controlados y uno puede considerarse extinguido, según informó la Corporación Nacional Forestal (Conaf) en su último balance.
Las llamas de los incendios activos afectan una superficie superior a las 360.000 hectáreas entre les regiones de Coquimbo y La Araucanía, aunque las zonas donde la situación es más delicada son las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío.
La coordinación de la ayuda internacional se ha acelerado en las últimas horas y este viernes llegó un primer grupo de bomberos mexicanos y argentinos, que se sumarán a la treintena de bomberos colombianos que ya trabaja en la extinción del fuego en la región del Biobío.
“El trabajo está siendo como corresponde, siempre en pro del país y de generar el menor daño posible al ecosistema”, explicó a Efe Carlos Armando Oviedo, subcomandante del Cuerpo de Bomberos de Bogotá y jefe del equipo que trabaja en la zona de Palomares, próxima a Concepción, la capital de Biobío.
El equipo colombiano partió de Bogotá el pasado día 25, llevando a Chile equipamiento y víveres para trabajar de 15 a 20 en la zona de los incendios. Tras una charla de capacitación sobre las características del terreno, este jueves entró en acción.
Incendios forestales en Chile; bomberos luchan contra el fuego que ha arrasado miles de hectáreas. (AP)
En las próximas horas está prevista la llegada de más brigadistas de México y Argentina, medio centenar de bomberos de Portugal y otros 50 voluntarios españoles.
Brasil también ha anunciado que enviará ayuda y para el lunes se espera el arribo de 60 bomberos franceses, precisó la presidenta chilena.
En cuanto a los medios aéreos para combatir la emergencia, Bachelet aseguró que 46 aviones y helicópteros están operando actualmente en las regiones afectadas por los incendios, y anunció que se han alquilado más aeronaves, como un avión de reconocimiento ACO español que ya está trabajando en terreno.
Además, se están afinando los detalles para el arribo de un enorme avión cisterna ofrecido por el Gobierno ruso que puede lanzar cargas de 42 toneladas de agua.
Esta aeronave, sin embargo, tardará aún en llegar, pues necesita 32 horas para cubrir el trayecto desde Rusia, que incluye dos escalas.
Por otro lado, el avión Supertanker, la aeronave cisterna más grande del mundo, cumplió su tercera jornada de trabajo y realizó varias descargas de agua en varios puntos críticos de las regiones de Coquimbo, al norte de Santiago, y del Maule, al sur de la capital.
Mientras los organismos de emergencia siguen centrados en la lucha contra las llamas, el Gobierno anunció el inicio de la entrega de bonos y subsidios para los miles de damnificados por la tragedia.
Bachelet dijo que se empezará a entregar bonos para comprar enseres y subsidios para la reparación o construcción de nuevas viviendas, aunque primero se asegurarán de que no haya riesgo de un rebrote de los incendios.
Las autoridades chilenas siguen investigando las causas de los incendios y han llegado a la certeza de que algunos de los fuegos son provocados.
“Es evidente que aquí hay gente que ha estado provocando los incendios. Es evidente también que otra gente por descuido los ha provocado, pero de ningún modo puede excluirse la intencionalidad como se está comenzando a comprobar”, dijo el ministro de Agricultura, Carlos Furche, a Radio Cooperativa.
En las últimas horas, cinco personas han sido detenidas acusadas de provocar incendios forestales, cuatro de ellas en la localidad de Chépica, en la región central de O’Higgins, y otra más en Linares, en la vecina región del Maule.
El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, anunció que el Gobierno presentará una querella por Ley de Seguridad del Estado contra los cuatro detenidos en Chépica, que fueron sorprendidos con bidones de parafina.
“El Gobierno no va a tolerar que personas inescrupulosas generen este tipo de hechos cuando todo el país lucha hoy por apagar los incendios forestales”, dijo Aleuy.
AAE
