Una historia de perseverancia, después de 4 años de aprendizaje, este 2021 Felipe Espinoza, un abuelito de 85 años de edad, terminó la carrera en ingeniería en procesos de gestión industrial.
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Don Felipe comenzó esta aventura hace 20 años, cuenta que, debido a que su padre murió cuando él era un niño, abandonó sus estudios y comenzó a trabajar desde los 7 para ayudar a su mamá. Cuando se hizo adulto su prioridad fueron sus cinco hijos, sin embargo, una vez que se hicieron adultos decidió retomar sus estudios desde la primaria hasta la universidad.
“Yo voy a buscar una chamba, yo creo que me voy a ir a la ciudad de México, y ahí voy a ver cómo le hago”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
Asegura que el camino no ha sido sencillo, desde que comenzó con sus estudios ha recibido todo tipo de críticas.
“Qué mejor no me digan y que mejor se pongan estudiar ellos, para ellos mismos y sus familias y a los jóvenes, que no se les cierre el mundo”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
Para pagar sus estudios, don Felipe se ha dedicado a vender cada viernes chiles y aguacates en un tianguis de Puebla.
“Yo he trabajado también como albañil, de todo, sé también de mecánica como manejaba; yo nunca me he quedado en la carretera, nunca de los nunca”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
Cuando comenzó la pandemia, tuvo que cursar su semestre en línea, y combinarlo con su servicio social en una oficina de Agua de Puebla.
“Con anterioridad compré el celular, bien bien no se pero ahí estoy tecleando, a ver si me da por otro lado pero ahí voy, también tengo mi compu. Ya iba yo con mis amigos y me echaban la mano”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
“Estuvo aproximadamente seis meses, aquí en la sucursal de plaza del sol estuvo cuatro meses después vino la pandemia y tuvimos que regresar a su casita, Él nos apoyaba en capturar información sobre nuestros clientes que recibimos de lunes a viernes”, Michel Lozano, asistente de dirección en Agua de Puebla.
Ahora don Felipe está estudiando inglés y se prepara para ingresar a una maestría. Para él, es un esfuerzo que dedica a su esposa que murió hace 20 años.
“Yo quisiera seguir estudiando, porque se me da, no me pierdo. No tengo límites, claro que como ya estoy grande pero pues sigo, si voy, si voy”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
“Tengo 85 años y aquí estoy y creo que me siento, vamos, ya ve usted, la verdad me siento como dicen los chavos, como navaja de barba”, Felipe Espinoza, ingeniero en procesos de gestión industrial.
Con información de Abraham Reza y Jorge Ulloa
DMGS
