MADRID, España, ene. 29, 2015.-Durante muchos años ‘la barriga’, la mal llamada curva de la felicidad estaba directamente relacionada con la calidad de vida mucho más acomodada y tranquila.
Hoy, sin embargo, una concentración excesiva de grasa abdominal preocupa mucho ya que dependiendo de lo que mida la circunferencia de esta parte del cuerpo, los médicos son capaces de predecir qué padecimientos puede tener esa persona en un futuro.
De hecho, tener la cintura más amplia que el pecho, significa que estamos consumiendo más calorías que las que conseguimos quemar; lo que marca la distancia entre vida saludable y sobrepeso asociado a enfermedades crónicas o mortales como: diabetes, padecimientos cardíacos, hipertensión arterial, apnea del sueño e incluso esterilidad.
Una lección muy aprendida por todos, pero que cuesta llevar a la práctica sobretodo en sociedades occidentales donde la obesidad se ha convertido en una epidemia.
España destaca especialmente ya que es el sexto país más gordo del mundo, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) en el 2014, que estimaba que uno de cada seis españoles padecía sobrepeso.
Pues no contentos con esta posición ahora los habitantes de las Islas Canarias, el archipiélago situado en el Océano Atlántico a la misma altura que el norte de África, suben posiciones rápidamente en el ranking y se convierte en la región de Europa con mayor índice de obesidad mórbida. Así al menos, lo advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS) que ha comprobado como el porcentaje de obesos ha crecido en ambos sexos, tanto hombres como mujeres, un 22 por ciento.
Algo que no se suscribe sólo a la población adulta. Un 49.6 por ciento de la población infantil en las Islas tiene sobrepeso.
Entre las causas, un exceso de sedentarismo y por supuesto una alimentación inadecuada.
Por ello, los expertos ya advierten de los riesgos y aconsejan fomentar una alimentación sana y adecuada a las necesidades, según la edad y el sexo.
Beber agua como única bebida, promover juegos activos, así como reducir el ocio sedentario, además de evitar premiar a los niños con alimentos ricos en azúcares y grasas.
Lo importante es enseñar a comer y moverse desde pequeños ya que se ha demostrado, según los últimos datos, que el sedentarismo causa el doble de muertes al año en Europa que la obesidad.
Los investigadores de la Universidad de Cambridge, de donde sale el estudio, corroboran con datos que la obesidad se relaciona con unas 337,000 de los 9.2 millones de muertes que se producen en Europa; el sedentarismo se vincula con el doble de defunciones: 676,000.
Por ello, la próxima vez que se planteen tomar el auto para desplazarse hagan una simple suma.
Con 20 minutos de un paseo rápido habrá consumido 100 calorías.
RAMG
