Arabia Saudita inicia nueva etapa en su historia

CIUDAD DE MÉXICO, México, ene. 23, 2015.- Arabia Saudita, el mayor exportador de petróleo del mundo, cerró una etapa de su historia este 22 de enero con la muerte del rey Abdullah, quien gobernó por casi 10 años a la nación fundada en 1932 por Abdulaziz Bin Abdulrahman Al Saud, como una monarquía absoluta basada en los principios del Islam.

El recién fallecido monarca, que tuvo una educación en una escuela religiosa tradicional, se convirtió en heredero en 1982. Dirigió de 1962 hasta 2013 la Guardia Nacional, milicia tribal formada para proteger a la monarquía,

 

Asumió la regencia en 1996 luego de que su hermano, el rey Fahd, le cediera el control de los asuntos de Estado, tras sufrir un derrame cerebral.

 

A pesar de su educación tradicional, el monarca recién fallecido introdujo importantes reformas económicas y sociales, entre las que destacan: El control de gastos en el Gobierno y la Corte; introdujo el internet; otorgó el derecho de voto a la mujer, así como otros derechos. También impulsó una ley de inversión extranjera.

A pesar de las reformas impulsadas por el monarca, especialistas coinciden en señalar que en el tintero quedan varios pendientes, como la apertura de los órganos de gobierno a la población y una mayor integración de la mujer.

La muerte de Abdullah vuelve a traer al centro del debate la necesidad de reformar el sistema sucesorio del reino, ya que, a diferencia de otras monarquías, el trono saudita no lo hereda el primogénito del rey fallecido, sino que ha ido pasando de uno a otro de los hijos (varones) de Abdulaziz por orden de edad, salvo algunas excepciones.

 

Abdullah se convirtió en rey con 81 años en un país donde dos tercios de la población tienen menos de 30. Sus dos primeros herederos, los príncipes Sultán y Nayef, murieron antes que él y aún quedan vivos varios de sus 42 hermanos.

SALMAN BIN ABDULAZIZ, NUEVO REY DE ARABIA SAUDITA

A la muerte del rey Abdullah fue investido como rey Salman Bin Abdulaziz, hermano del rey Fahd, fallecido en 2005, y hermanastro del recién fallecido monarca.

 

Entre sus primeras acciones de gobierno estuvo el designar a su sobrino Mohamed bin Nayef como segundo en la línea sucesoria. Bin Nayef ocupa actualmente el cargo de ministro del Interior y es hijo del fallecido Nayef bin Abdelaziz, hermano del actual rey.

 

La “baia” o ceremonia de juramento de fidelidad de los ciudadanos al nuevo rey y al nuevo heredero comenzará después del último rezo de este viernes.

LOS RETOS DEL NUEVO MONARCA

Entre los retos que tendrá que enfrentar el nuevo monarca saudita está el de los bajos precios del petróleo. Según analistas el rey Salman mantendrá la línea de su antecesor y de la OPEP de mantener alta la producción de crudo.

“El rey Abdullah fue el arquitecto de la estrategia actual de mantener la producción alta y forzar la salida de los jugadores más pequeños en lugar de realizar un recorte”, dijo John Kilduff, socio de Again Capital LLC en Nueva York.

              
Kilduff dijo que Salman es conocido como un defensor de los intereses de Arabia Saudita y que el mercado podría esperar que mantenga una producción alta.

Tushar Bansal, analista de FGE, dijo que “en general, a partir de ahora no se espera un cambio importante en las políticas saudíes”, pero sostuvo que el mercado se centrará en si el ministro de Petróleo de Arabia Saudita podría ser reemplazado.
              

 

“Ali Al-Naimi, ha sido el ministro de petróleo desde 1995. Anteriormente se reportó que había expresado su deseo de dimitir, pero el rey Abdullah le pidió que permaneciera mientras él estuviera en el poder”.
              

 

“Por lo tanto, la verdadera pregunta es, si hay un nuevo ministro de Petróleo pronto, ¿esto dará lugar a un cambio en la política energética saudí?”, agregó.
              

Los futuros del crudo subieron inicialmente el viernes, pero luego se debilitaron y todavía operaban a unos niveles más de un 50 por ciento por debajo de sus picos más recientes en junio del 2014.
              

Una continuación de las políticas existentes estaría en línea con lo que sucedió después de la última sucesión. En el 2005, cuando murió el rey Fahd, surgieron preocupaciones similares sobre el liderazgo de Arabia Saudita.
              

Tras el anuncio de la muerte del rey Fahd el 1 de agosto del 2005, el crudo Brent subió a un máximo histórico de casi 61 dólares por barril.
              

El príncipe heredero Abdullah, que en la práctica gobernaba desde que Fahd sufrió un derrame cerebral en 1995, asumió como nuevo monarca y los funcionarios buscaron calmar a los operadores al subrayar que no habría cambios en la política petrolera de mantener a los mercados bien abastecidos.

 

MACO