LIMA, Perú, oct. 29, 2014.- El histórico y venerado Señor de los Milagros, patrono de la fe del Perú, fue criticado por voceros de la municipalidad de Lima por el inmenso caos vehicular ocasionado por su procesión en las calles de la capital peruana.
La noche de este 28 de octubre, último día de su encuentro con el pueblo peruano, el Cristo morado, como ocurre todos los años, convocó a miles de fieles a la procesión religiosa que es considerada la más grande del mundo.
En esta ocasión, el sistema de transporte colectivo colapsó porque según Gustavo Guerra, presidente de la empresa Pro Transporte, que administra los autobuses del Metropolitano, el Señor de los Milagros extendió su recorrido más allá de lo programado, hecho que coincidió con el horario “pico” del parque automotor.
“Por muy importante que pueda ser la procesión del Señor de los Milagros, se tiene que respetar los horarios planteados, sino se agravan estas crisis”, dijo el funcionario socialista de la administración municipal de izquierda que rige los destinos de la capital peruana.
Las reacciones en la iglesia no se hicieron esperar.
El vocero del arzobispado de Lima, Fernando Lino dijo que la procesión del Señor de los Milagros es un histórico acto de fe y tradición de más de 400 años y culpó más bien al municipio metropolitano de no haber organizado planes de contingencia con una actividad que se planifica durante todo un año.
“El Señor de los Milagros no va a dejar de salir a las calles donde recibe el culto y fervor de los peruanos porque el municipio de Lima no hace bien su trabajo”.
La procesión del Señor de los Milagros que sale a las calles durante tres días en el mes de octubre es el máximo símbolo de la fe y religiosidad del Perú. Sus miles de devotos, que visten hábitos color morado, no recibieron tampoco de buen agrado las críticas de la autoridad del transporte limeño y dejaron clara constancia que cuando el Señor sale en procesión el Perú se moviliza masivamente alrededor de la fe y su venerada imagen.
HVI
