Abren maestría para estudios musicales en España

MADRID, España, jueves 7 ago. 2014.- Ser una rock and roll star requiere más esfuerzos de los que algunos imaginan.

 

Lejos quedó aquella idea idílica de sexo, drogas y rock’n’roll para ir, guitarra en mano conquistando escenarios y dejando un amor en cada puerto (o en cada pueblo donde recayeran aquel día) con canciones que quitan el hipo.

 

Para ser un buen rockero, ahora además al arte de saber tocar y cantar, hay que añadirle codos, giro lingüístico con el que los españoles hacen referencia a las interminables horas de estudio.

 

Para llegar a ser abuelo en un escenario como el guitarrista de los Rolling Stone, Keith Richards, sin que el tiempo ni otras sustancias se lleven la habilidad y energía rockanrollera, o tratar de emular a otros grandes mitos de altura como Jimi Hendrix o Mark Knopfler, antes hay que pasar por la Universidad.

 

Si, como lo oyen, el saber no ocupa lugar, y ahora parece que menos que nunca ya que en España surgen las nuevas maestrías y carreras universitarias al mismo ritmo que el número de desempleados.

 

Por primera vez en la historia de España (que ya es mucha historia para aquellos que si hayan estudiado) la Escuela Superior de Música Jam Session de Barcelona, la capital catalana, imparte el primer Título Superior de Rock, Nuevas Tendencias y Músicas Urbanas.

 

Se trata de un centro privado que a partir de septiembre ofrecerá el primer curso como carrera homologada con el Plan Bolonia, es decir, el plan que impera ahora en España para estudios superiores, y por lo tanto con título oficial, equiparándose así a países como Estados Unidos, Inglaterra o Nueva Zelanda que si cuentan en con esta titulación.

 

La carrera durará cuatro años y contará con un total de 240 créditos, cada uno de los cuales costará sobre los 115 dólares.

 

Al curso podrán acceder un máximo de 30 alumnos procedentes de toda España y las materias se impartirán en castellano, catalán e inglés.

 

Pero las dificultades para convertirse en todo un genio del rock no terminan ahí. Si es de los que piensa que cualquiera podrá acceder a este nivel de estudios, se equivoca.

 

Habrá exámenes para poder matricularse a primeros de septiembre. Consistirán en diferentes pruebas auditivas y análisis de partituras, además de ofrecer una audición ante un equipo de ocho profesores, de los instrumentos que dominan con el fin de evaluar si son aptos para realizar esos cuatro años de estudios.

 

A estas alturas de la crónica ya se habrán preguntado sobre las diferentes materias que se deben controlar y superar para alcanzar el objetivo de ser todo un ídolo de la canción.

 

Los alumnos tendrán que memorizar entre otras cosas, historia de la música, pedagogía, informática para conocer como es la grabación y postproducción, pero además tendrán que demostrar habilidades auditivas y por supuesto, ser un maestro con el instrumento elegido para tal fin.

 

Todo pensado según los responsables del centro para que el licenciado en Rock, sea todo un intérprete, esto es, con capacidad para ser creativos y sobretodo que posean personalidad, algo imprescindible, eso sí, para ser una estrella en el escenario.

 

En Madrid, Yolanda Fernández