Primer parque acuático para perros en España

MADRID, España, 9 jul. 2014.- Cada 3 minutos se abandona a  una mascota en España. O lo que es lo mismo, 150,000 animales de compañía deambulan sin rumbo tras ser expulsados de sus hogares.

 

Una práctica que crece en época estival ya que entre las causas el abandono se produce por no poder cuidarlo o el desembolso de dinero extra que supone que alguien cuide del perro o del gato mientras estamos de viaje.

 

Pero este verano, no vamos a quedarnos en la noticia negativa si no en la positiva. Y es que en la España dividida en dos facciones muy claras, también en cuestión de animales se pone de manifiesto.

 

De hecho, uno de cada tres españoles propietario de un perro o de un gato confiesa que lo quiere más que a sus propios amigos. Tanto que incluso ha abierto en Cataluña, al noreste del país un parque acuático cuyos exclusivos clientes son los perros.

 

Ahora podrán disfrutar de las altas temperaturas veraniegas mientras se dan un chapuzón en la alberca, se estrenan subiendo a una tabla de windsurf o simplemente gozan saltando desde los diferentes toboganes directamente al agua.

 

Can Jané, así se llama la primera propuesta de ocio canino solo para perros, cuenta con un lago artificial de 1,000 metros cuadrados a media hora de Barcelona, en una gran finca, que hará las delicias de las mascotas y sus dueños, y donde podrán disfrutar de fiestas y juegos acuáticos.

 

La idea, como tantas otras originales, nació a la sombra de la crisis y viendo que el negocio de residencia canina no andaba muy boyante.

 

Federico Cano, uno de los fundadores del complejo, se dedicó a criar perros desde los años 70. Lo que le embarcó en toda una aventura de viajes a otros países y puestas en común acerca de estos animales.

 

Fue entonces donde se dio cuenta de la diferencia de culturas y la falta de espacios para el cuidado y atención personalizados de las mascotas en España.

 

Años después su sueño se hizo realidad en un resort donde se aglutinan casi 6 hectáreas de instalaciones en las que se puede encontrar un hotel de 5 estrellas, una alberca de rehabilitación y musculación, parques, jardines, pistas de entrenamiento, pistas de obstáculos, zona para cachorros, escuela, y aula de formación.

 

Pero además es un resort de lujo ya que el hotel cuenta con dos tipos de habitaciones (todas de 10 m2): de invierno, en un edificio con calefacción, y de verano, al aire libre, con techo isotérmico, ventilación, sombra natural y una zona de recreo individual por habitación con arboledas rodeando la zona.

 

A eso se suma la posibilidad de que el perro duerma aún más cómodo en alguna de las suites, más grandes, o para que la comporta con alguno de sus hermanos o amigos ya que caben 3 o 4 perros juntos.

 

Vamos todo un lujo vacacional para los animales que nada tiene que ver con la triste noticia del abandono que nos invade cada año.

 

No sé si algún día existirá un término medio, aunque entonces no sería noticia y no se lo contaríamos, claro.

 

 

Yolanda Fernández