CIUDAD DE MÉXICO, México, mayo 14, 2015.- Marcelo Ebrard, ex jefe de Gobierno del Distrito Federal, podría convertirse en diputado federal si ocurre algo como lo sucedido en la delegación Iztapalapa con “Juanito” en 2009.
El 29 de abril de 2015, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revocó la candidatura de Marcelo Ebrard a diputado federal por la vía plurinominal que presentó Movimiento Ciudadano, al señalar que antes había participado en el proceso interno del PRD, al que renunció al no obtener la nominación que buscaba.
Ante esta situación, Movimiento Ciudadano pidió al Instituto Nacional Electoral (INE) el registro de Marcelo Ebrard como candidato suplente a legislador federal.
El Consejo General del Órgano Electoral aprobó la solicitud el 13 de mayo y Ebrard fue designado como suplente del candidato a diputado federal plurinominal, René Cervera, por Movimiento Ciudadano.
Ebrard ocupa el lugar al que renunció Gonzalo Fabián Medina Hernández.
¿Cómo surgió el término de ‘Juanito’?
El término ‘juanito’ surgió en 2009 cuando Rafael Acosta Ángeles, apodado “Juanito”, aceptó postularse a la candidatura del Partido del Trabajo (PT) para jefe delegacional de Iztapalapa, con la condición de que al ganar solicitaría licencia para dejar el cargo a Clara Brugada, quien sería nombrada sustituta por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Y es que en junio de 2009 el PRD vivió un conflicto interno por la definición de su candidato al gobierno de Iztapalapa. Clara Brugada fue declarada ganadora ante la inconformidad de la corriente Nueva Izquierda de “Los Chuchos” que pretendía la postulación de Silvia Oliva Fragoso.
Silvia Oliva apeló y el TEPJF anuló el triunfo de Brugada y obligó al PRD a registrar a la candidata de “Los Chuchos”.
Descontento, López Obrador llamó a la ciudadanía a no votar por el PRD sino por el PT. Dos semanas antes de la elección, AMLO anunció que Rafael Acosta sería el candidato petista e informó que si ganaba pediría licencia.
El 5 de julio Rafael Acosta “Juanito” ganó la elección y, aunque en principio se negó a pedir licencia, terminó haciéndolo y en diciembre la ALDF nombró a Brugada como jefa delegacional sustituta.
Otros casos
Casos similares ocurrieron en septiembre de ese mismo año, cuando días después de haber asumido el cargo, ocho diputadas federales de varios partidos pidieron licencia para dejar su lugar a sus suplentes, todos hombres. En ese momento se les llamó candidatas “Adelitas”.
Como la ley obligaba a que al menos el 40% de las candidaturas al Congreso estuvieran ocupadas por mujeres, los analistas consideraron que los partidos las habían postulado para cumplir con la cuota de género.
Las legisladoras, todas ellas plurinominales, recibieron el mote de “diputadas juanitas” y, pese a las críticas públicas, la mayoría obtuvo licencia para separarse del cargo y cederle la diputación a sus suplentes.
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