YUCATÁN, México, jun. 29, 2015.- En Citilcum, una comisaria indígena maya localizada al oriente de Yucatán, cada año se celebra el “Kotz Kaal Pato”, una fiesta popular en honor a San Bartolo, en la que se sacrifican a diversos animales, entre ellos patos.
La fiesta popular tiene más de 150 años y lleva el nombre “Kotz Kaal Pato” que significa, arrancarle el cuello o el pescuezo a un pato.
Durante la ceremonia se colocan piñatas artesanales, fabricadas con cartón y colores brillantes, en su interior no hay dulces, hay animales. Como cualquier otra piñata, éstas son golpeadas con los animales adentro.
Si el animal, entre ellos patos, zorros y zarigüeyas se escapa de la piñata, los pobladores lo persiguen lanzándolos al aire hasta matarlos.
Los pobladores de Citilcum conocen perfectamente el proceso de la ceremonia y para algunos es un orgullo matar a los animales.
“Se sienten orgullosos que ya cumplieron cuando terminan de cortar al pato y quitarle su pescuezo”, platicó Victor Can, poblador de Citilcum.
Autoridades ambientales emitieron una recomendación para erradicar festejos que lastimen, torturen y maltraten a los animales. Esperan que la población de Citilcum acate este consejo.
“Divertirse y regocijarse arrancándole la cabeza a un animal es una lenta agonía, primero hay que conciliar, tomar acuerdos y luego producir el cambio”, dijo Rosario Sosa, presidenta de la Asociación por los Derechos de los Animales.
Por su parte, el comisario municipal de Citilcum, Gamaliel Oxté Huitz, dijo que es una tradición que no se debe romper.
“Sé que está prohibido, está prohibido, pero romperla no, esperemos que no”, comentó Gamaliel.
La ceremonia se festeja cada mes de abril y en ella participan todos los habitantes de la comisaria, la mayoría indígenas mayas.
AAA