Celebran Domingo de Ramos en Catedral Metropolitana

CIUDAD DE MÉXICO, México, mar. 29, 2015.- El cardenal Norberto Rivera encabezó el Domingo de Ramos en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.

La celebración de este domingo pareciera a simple vista un contrasentido, comenzamos con un clima festivo y de triunfo, gritando con ramos y palmas en las manos: o sana al hijo de David, bendito el que viene en el nombre del Señor, y terminamos con el grito: crucifícalo, crucifícalo, dejándolo colgado entre dos ladrones.

Aseguró que en ese aparente contrasentido se encuentra el misterio de Jesús.

Es ante la cruz de Jesús y ante la cruz que todos y cada uno de nosotros necesariamente llevamos en donde se purifica nuestra fe, y en donde podemos llegar al reconocimiento sincero y amoroso de que Jesucristo verdaderamente es el hijo de Dios.

Acompañado por el arzobispo italiano Enio Antonelli durante la lectura de la Pasión, el arzobispo primado de México dijo que el proceso de Jesús se renueva en cada hombre o mujer que sufre o es perseguido injustamente. 

A través de la historia hemos preguntado; quién mató a Cristo, fueron motivos políticos y religiosos los que lo llevaron al matadero cuando la palabra de Dios nos ha narrado que Judas traicionó, Pedro negó, Pilatos se lavó las manos, la multitud miraba de lejos, los soldados se dividieron las vestiduras, los ladrones que lo acompañaban en la cruz eran unos asesinos, etcétera, nos está diciendo que es la humanidad entera la que está representada en estos personajes, ahí estamos nosotros, las acciones que llevan a Jesús a la muerte son las acciones del aquel tiempo y de nuestro tiempo.

Afuera de la Catedral, el cardenal bendijo las palmas del Domingo con el que inicia la Semana Santa.

Santifica con tu bendición estos ramos para que quienes acompañamos jubilosos a Cristo Rey podamos llegar por él a la Jerusalén del cielo.

MLV