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ARTE Y CULTURA

Tove Jansson: La finlandesa que imaginó el universo de los Mumins

Con el paso de las décadas los Mumins se han convertido en todo un fenómeno global que ha llegado al teatro, cine y televisión.

A muchos, el nombre de Tove Jansson probablemente no les diga nada.

Probablemente ocurre lo mismo si hablamos de “Los Mumins” (en inglés Moomins).

Sin embargo, si les mostramos esta imagen, probablemente reconocerán haber visto a estos personajes alguna vez:

Se trata de “Los Mumin”, personajes que forman parte de un peculiar universo literario creado por la autora finlandesa Tove Jansson, que con el paso de las décadas se ha convertido en todo un fenómeno global que ha llegado al teatro, cine y televisión.

La historia tanto de estos personajes, como de su creadora, es tan extraordinaria que bien vale la pena difundirla.

La niña excéntrica de Helsinki

Tove Jansson nació el 9 de junio de 1914 en Helsinki, Finlandia, en el seno de una familia donde el arte y la cultura era cosa de todos los días. Por un lado, su papá fue el escultor Viktor Bernhard Jansson, mientras que su mamá, Signe Hammarsten, era ilustradora y diseñadora gráfica.

Tove Jansson de niña (Imagen de moomin.com).

Los hermanos de Tove también se desempeñaron como artistas. Lars fue escritor e historietista y Per Olov, fotógrafo. De esta forma, la cotidianidad de este hogar estuvo marcada por el ruido y la excentricidad, por ejemplo, la niñera que trabajaba con ellos acostumbraba a leer a Platón y la mascota de la familia era un mono tití.

La familia de la escritora e ilustradora Tove Jansson (Imagen de moomin.com).

En medio de este ambiente donde el uso de la imaginación era más que un juego y sus integrantes contaban con total libertad creativa, Tove también sintió inclinación por las disciplinas creativas y visuales. De 1930 a 1933 estudió en Konstfack (Escuela Superior de Arte, Artesanía y Diseño de Estocolmo); de 1933 a 1937 en la Academia Finlandesa de Bellas Artes; para después ingresar en L’École d’Adrien Holy y L’École des Beaux-Arts de París.

Lamentablemente, esa burbuja de amoroso bienestar en la que parecía moverse Tove, no fue indiferente a los horrores que tenían lugar en Europa a causa de la Segunda Guerra Mundial.

Un troll poco temible

Durante el tiempo que pasó estudiando en Estocolmo, Tove vivió en casa de su familia sueca, donde acostumbraba a hurtar comida de la cocina. Cansado de que su sobrina constantemente tomaba alimentos de la despensa, el tío Einar Hammarsten le contó que en el armario donde guardaban la comida vivía un horrible “Moomintroll” que acostumbraba a soplar un viento gélido sobre el cuello de las personas. Esta anécdota, en apariencia intrascendente, haría que Tove sintiera una rara fascinación por los “trolls”, raza antropomorfa propia del folclore escandinavo.

Poco después Tove y su hermano tuvieron un intenso debate sobre Immanuel Kant. Tove perdió y para vengarse dibujó en el cuarto de su hermano a la figura más horrible que pudo concebir su imaginación. Debajo del dibujo escribió la palabra “Snork”:

Primer trazo de un Mumin, realizado por Tove Jansson. (Imagen de moomin.com)

Ese personaje feo, delgado, con cola diabólica y nariz alargada, se volvió el primer boceto de un Mumin. Poco a poco este extraño personaje fue cambiando, volviéndose más regordete y se le dotó de una apariencia más amigable. En sus primeros trabajos como ilustradora, la firma de Tove ya mostraba a este primer Mumin:

Firma de Tove Jansson (Imagen de moomin.com).

Debido a la guerra que entonces se desarrollaba, Tove se sentía tan deprimida que fue escribiendo e ilustrando historias de corte inocente, donde los personajes eran soñadores y vivían en un mundo amigable.

De esta forma en 1945 fue publicado Los Mumin y la gran inundación (Småtrollen och den stora översvämningen), un libro infantil protagonizado por el Troll Mumin y por Mamá Mumin, su contraparte femenina.  Aunque este libro obtuvo críticas positivas, fueron La llegada del cometa (Kometjakten) y La familia Mumin (Trollkarlens hatt), lanzados en 1946 y 1948, respectivamente, las publicaciones que catapultaron al éxito a su autora.

En la década de los cincuenta, el periódico británico Evening News se interesó en publicar una tira diaria sobre los Mumins. Al principio las historias eran ideadas y dibujadas por Tove, pero poco a poco fue relegando este trabajo a su hermano Lars, que mantuvo y respetó la identidad de la historia; estas viñetas se publicaron hasta 1975.

Para 1966, ya con varias tiras cómicas y libros ilustrados sobre los Mumin, Tove fue reconocida por su obra con el premio Premio Hans Christian Andersen, considerado el Premio Nobel de literatura infantil.

Tove Jansson y sus Mumin, imagen tomada en 1956.

¿Y qué son los Mumin?

Son troles escandinavos parecidos a hipopótamos que viven en el Valle Mumin. Son dulces, amables, un tanto ingenuos y siempre están dispuestos a vivir nuevas aventuras junto con sus amigos. Dentro de su mundo de fantasía se resalta la unión de la familia y el respeto al prójimo.

Libro de los Mumin, publicado en 1948 (Imagen de moomin.com).

La otra Tove

Si bien Tove es reconocida en todo el mundo por los Mumin, esta mujer fue tan polifacética que también hizo importantes aportaciones en otros campos.

Como pintora sus obras fueron expuestas en gran variedad de exhibiciones, la primera de ellas en solitario fue en 1943. Tove fue productiva durante toda su vida, y su estilo pasó del impresionismo clásico al modernista abstracto. También realizó varios murales que aún se encuentran en su ubicación original.

Su estudio estaba ubicado en Helsinki, aunque también solía pasar temporadas en Klovharu, una pequeña isla del golfo de Finlandia donde vivía con su pareja, la artista gráfica Tuulikki Pietilä.

Estudio de Tove Jansson en Finlandia (Imagen de moomin.com)

Tove estuvo a cargo de las ilustraciones para las versiones suecas de libros como Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll, y El hobbit, de J. R. R. Tolkien. También trabajó en la revista satírica Garm como historietista e ilustradora, donde creaba tiras cómicas de corte político.

En el campo literario, además de sus libros sobre los Mumin también escribió novelas ajenas a la literatura infantil, como el relato autobiográfico La hija del escultor (1968) o El libro del verano (1972).

El boom del universo Mumin

A partir de 1970 las historias de los Mumin se volvieron más maduras y realistas, claro, dentro de lo que permitía el universo creado por Jansson. Los personajes fueron manifestando una mayor complejidad psicológica, lo que permitió una mayor profundidad argumental.

(Imagen de instagram.com/moominofficial/)

Tanto los libros como la tira cómica traspasaron fronteras y con las décadas el universo Mumin ha tenido mayor alcance. Las versiones animadas que se han realizado contribuyeron a la difusión de estos personajes, de hecho, una de ellas llegó a México.

En la actualidad, estos personajes son considerados de culto, y alrededor de ellos hay una enorme cantidad de productos y memorabilia.

En Finlandia aprovecharon este éxito y abrieron un parque temático llamado Mundo Mumin en la ciudad de Naantali, considerado uno de los principales atractivos que esta nación le ofrece al turismo internacional.

También hay un Museo dedicado a los Mumins en la ciudad de Tampere, donde se exhiben modelos tallados a mano e ilustraciones originales realizados por Tove Jansson.

El legado

Tove Jansson falleció el 27 de junio de 2001 en Helsinki. No obstante, su obra parece más viva que nunca.

Aún y cuando compañías como The Walt Disney Company se han interesado en adquirir los derechos de estos personajes, sus actuales propietarios (la familia Jansson) han rechazado cualquier oferta. Es Sophia Jansson, hija de Tove, quien por ahora se hace cargo de las decisiones entorno a estos personajes.

Y esta es la historia de Tove Jansson, una mujer poco común que imaginó un mundo alejado de la violencia y las preocupaciones, y cuya creación literaria no sólo permanece vigente, sino que en estos tiempos resulta aleccionadora.

Tove Jansson, creadora del universo de los Mumin (Imagen tomada de Instagram)