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ARTE Y CULTURA

Tortillería Chinantla, el negocio mexicano que revoluciona la comida en Nueva York

En 1992, Erasmo Ponce Felipe inicia un pequeño negocio usando una máquina de tortillas de segunda mano y el apoyo de cuatro personas.

Tortillería Chinantla inicia operaciones en medio de una zona industrial y desde entonces, todos los días produce cientos de tortillas calientes que terminarán en los guisos de sus clientes. La única diferencia entre esta tortillería y las demás, es que esta se encuentra en el barrio de Williamsburg, Brooklyn.

Nombrada en honor del pueblo poblano de Chinantla, este negocio 100% mexicano satisface la demanda de alimentos típicos de nuestro país, ya sea en Nueva York o en Boston.

Gracias a la nueva explosión de comida mexicana en Estados Unidos, negocios como el iniciado por Ponce Felipe ven un rápido crecimiento en su popularidad, lo que les permite llegar a producir 22 toneladas diarias de harina necesaria para hacer tortillas de maíz.

La tortillería es un negocio familiar (Tortillería Chinantla)

 

A pesar de estar a miles de kilómetros de México, esta humilde tortillería local ya cuenta con sucursales en 11 estados de la costa este de Estados Unidos y registra ganancias que superan los cuatro millones y medio de dólares.

Conforme crece el número de estadounidenses que se enamoran de la cocina mexicana, negocios como la Tortillería Chinantla se multiplican en las ciudades de la unión americana, en especial entre la comunidad hispana que añora la comida de su tierra.

Donde hace algunas décadas no se encontraba una sola tortilla, ahora se pueden comprar de maíz azul, de las taqueras y tostadas caseras para disfrutar en cualquier ocasión.

Tortilla de maíz mexicana (Wikimedia Commons)

Tortillerías industriales que operan en Estados Unidos hay muchas, en especial en el sur de este país, pero negocios como el de Ponce Felipe y sus socios son pocos, pues aún conservan ese aire de autenticidad que las empresas más grandes han perdido con el paso de los años.

 

 

Es probable que un turista mexicano que extraña la comida de su país y se encuentra en Nueva York, pueda comer un “pedazo de casa” con las tortillas que este pequeño negocio familiar 100% mexicano produce en un barrio de Brooklyn desde hace más de dos décadas.