Los números son inquietantes:
A una semana del sismo se calculan 800 mil damnificados en Oaxaca, 41 municipios donde Protección Civil declaró emergencia extraordinaria, 500 escuelas que no pueden abrir sus puertas.
Al mismo tiempo, en Chiapas, se estiman más de un millón de damnificados, se registran afectaciones en las 15 regiones del estado, 50 mil casas con daños y más de mil escuelas que no pueden tener clases. Además, 107 tramos de carretera donde no puede pasar la ayuda por daños a la infraestructura y 122 municipios donde se ha declarado emergencia extraordinaria.
Protección Civil ha activado los recursos del Fondo Nacional para la Atención de Desastres para brindar apoyo a los más necesitados pero las estadísticas lo dicen bien claro:
No es suficiente para 2 millones de damnificados.
El llamado va para toda la población del país. Centros de acopio han sido establecidos por el territorio nacional. México se encuentra ante una emergencia humanitaria. Tales son las consecuencias reales de un sismo de magnitud 8.2 que devastó la zona sur del país, exacerbado por cientos de réplicas y las fuertes lluvias que han provocado deslaves e inundaciones (sin mencionar la tormenta tropical Max que actualmente se acerca a Morelia, Guerrero y Oaxaca).
No hay duda de que en estos momentos hay gente donando en los centros de acopio, hay voluntarios recolectando los apoyos, hay elementos del ejército y la policía movilizándose y repartiendo víveres… pero siguen siendo 2 millones de personas.
Todo kilo de ayuda es bienvenido y es suficiente para alimentar a cierto número de damnificados, pero es suficiente para un día o dos. ¿Qué van a comer el resto de la semana? ¿Qué van comer en los meses que van a transcurrir mientras reconstruyen sus viviendas, sus escuelas y sus comercios?
Los más cínicos dirán que ellos pueden valerse por sí mismos, y en efecto, eso es precisamente lo que está sucediendo en muchas comunidades rurales de Oaxaca y Chiapas donde la ayuda no ha llegado, ya sea porque el apoyo no alcanza o porque se encuentran incomunicados a causa de los caminos dañadas.
Pero no le corresponde ni al gobierno federal, ni a la sociedad civil, darle la espalda a los poblados más necesitados en tiempos de crisis, particularmente en este mes patrio. Tus amigos pueden donar hoy y tus familiares podrán donar mañana, pero no será suficiente sino hasta que TÚ seas el que vaya a un centro de acopio y ponga su parte.
Ahora bien ¿qué puedes donar exactamente? Mira el siguiente video:
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