Esta mañana el Papa Francisco habló en contra de la doble moral que mantienen aquellos que se dicen buenos cristianos mientras cometen actos opuestos a la fe.
En un discurso improvisado después del sermón en la homilía que pronunció desde su residencia en Santa Marta, el Papa habló de las prácticas hipócritas de un mundo ambicioso y obsesionado con el dinero.
Estas palabras caen acorde al pensamiento de un Papa que ha hablado, extensamente, del regreso a la humildad en la fe católica.
El Papa dijo, según El País, que “es un escándalo decir una cosa, y hacer otra. Eso es una doble vida”:
“Están los que dicen, soy muy católico, siempre voy a misa, pertenezco a esta asociación… Pero en realidad, mi vida no es cristiana, no le pago a mis empleados salarios apropiados, exploto a la gente, hago negocios sucios, blanqueo mi dinero, llevo una doble vida (…) Hay muchos católicos que son así y es un escándalo (…). Cuántas veces hemos oído todos decir ‘si esa persona es católica, mejor ser ateo”
Así, entre otras cosas, el Papa habló de los grandes magnates que explotan a sus empleados, evitan sus responsabilidades fiscales o llevan negocios sucios además de condenar las actitudes de muchos frente las crisis humanitarias de migración actuales.
Porque, para el Papa, también, muchos están tomando posturas políticas y económicas completamente opuestas a los valores cristianos.
Así, con este discurso, parece que la cabeza de la Iglesia Católica desaprueba, indirectamente, todo lo que están haciendo los jefes de estado de los nuevos nacionalismos conservadores.
Por eso, ¿No parece ser éste un regaño bastante certero a las actitudes actuales de Donald Trump?
Migrantes haitianos esperando cruzar a Estados Unidos por Tijuana.(NOTIMEX/FOTO/EDUARDO JARAMILLO/EJC/HUM)
